Morena y la Alianza Opositora necesitan de candidatos al Senado y a las diputaciones con una misma característica: que «garanticen» triunfos o por lo menos aporten el mayor número de votos.

Dicho de otra forma, son tiempos de dar, no de exigir recibir.

Los que deciden tendrían que dejar de lado amistades y compromisos, aunque eso, que parece sencillo, a la hora de las presiones no lo es.

De hecho, por estos días, un gran número de hombres y mujeres, algunos buenos políticos, otros que se creen tales y muchos que ni idea tienen de lo que es la política, el servicio público y lo que debe ser un legislador, exigen ser postulados.

Medio saben de sus limitaciones, pero quieren y creen que sus partidos y Rocío Nahle o Pepe Yunes, según sea el caso, los harán ganar.

Pero ambos están en la situación de que necesitan que quienes serán candidatos a las Cámaras aporten votos.

Morena, Nahle y el gobernador Cuitláhuac saben de todo lo que tienen a su favor, es decir, el aparato del Estado, pero no pueden desconocer lo que dicen las encuestas reales. Saben también lo que han hecho mal, sus pecados y sus puntos débiles.

Si tan mal estuviera el rival, como dicen, no estarían preparando y organizando lo que cocinan para imponerse.

Del lado de la oposición tampoco desconocen sus negativos como partidos (por eso ahora son oposición) y a lo que enfrentarán.

Pero esas cuestiones, para muchos políticos que ambicionan un cargo, pasan a segundo término.

Unos quieren una diputación o hasta le tiran a senadurías para ganar impunidad, otros porque -diría Miguel Alemán precisamente en su campaña y luego repetiría Fidel Herrera ya siendo gobernador- no tienen llenadera.

Esto lo vemos más, por razones naturales, en Morena porque actualmente detentan el poder, pero en la oposición hay actitudes similares. En Morena, insistimos, algunos quieren impunidad pues está en juego su tranquilidad. Otros rápidamente le encontraron sabor al poder.

Los grupos exigen posiciones y piden como si realmente aportaran mucho y merecieran.

Y en la oposición, lo mismo en el PRI que en el PAN –panistas dicen que Enrique Cambranis y su grupo quieren para Acción Nacional alrededor de 20 de las 30 candidaturas a las diputaciones locales; si tienen las cartas ganadoras yo creo se las darán- o el PRD hay quienes fingen creer, a su conveniencia, que será una elección como cuando tenían el control.

En fin, en la oposición, como lo dijo Amadeo Flores en su mensaje a los integrantes de Vía Veracruzana en su reunión del pasado sábado con la presencia de Pepe Yunes, los intereses personales tienen que dejarse de lado y la lealtad, la unidad y esfuerzo debe concentrarse en un objetivo único: sacar a Morena del gobierno.

Para la oposición si no hay triunfo no habrá diputaciones, ni cargos ni alcaldías el próximo año.

Para los de Morena si no hay triunfo se acabó el disfrute del poder y sabrán lo que es la zozobra.

¿DIPUTACIÓN A PATROCINIO? Reapareció el exsecretario de Gobierno, Patrocinio Cisneros. El pretexto fue invitar a la pista de hielo de Coatepec, en donde dicen sigue mandando. También hay quienes dicen que le espera una diputación, ¿será?