El Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz, ORFIS, dio a conocer el informe de resultados de la revisión a la cuenta pública de 2022, en la que destaca –igual que en el año anterior– que la inmensa mayoría de los ayuntamientos veracruzanos presentaron irregularidades en el manejo de los recursos.

Hay cientos de observaciones de carácter financiero, derivadas de la revisión a la obra pública y hasta producto de malos manejos de la deuda pública.

Esas observaciones hacen suponer un presunto daño patrimonial por más de mil 500 millones de pesos, indica la fuente.

La mayoría de esas irregularidades –mil 305 millones de pesos– corresponde al primer año del cuatrienio de los ayuntamientos, aunque también se giraron algunas observaciones a dependencias estatales, como las secretarías del Medio Ambiente y de Desarrollo Agropecuario; a entes descentralizados.

Este martes está programada la entrega del informe del ORFIS en el Congreso de Veracruz.

Habría que destacar que sólo 17 ayuntamientos salieron limpios; entre ellos destaca Córdoba, Boca del Río, Nanchital, Alto Lucero y Banderilla.

El resto, 195, presentan observaciones del ORFIS, aunque por los montos destacan San Andrés Tuxtla (más de 53.5 millones de pesos), municipio gobernado por María Elena Solana (Morena); Veracruz (39.1 millones), ayuntamiento encabezado por Patricia Lobeira (PAN); Poza Rica (24.7 millones), de Fernando Remes Garza (Morena; Las Choapas (14 millones de pesos), de Mariela Hernández (Morena); Orizaba (14 millones), de Juan Manuel Diez Francos (PRI); San Rafael (12.4 millones de pesos), de Héctor Lagunes Reyes (PRD); y Perote (11.8 millones), de Delfino Ortega Martínez (PRI).

No importan las siglas partidistas; por igual, ayuntamientos surgidos de todas las fuerzas políticas presentan presunto daño patrimonal.

En su revisión, el ORFIS detectó todo tipo de irregularidades, desde aquellas de carácter financiero-presupuestal, hasta las que tienen que ver con la obra pública.

Por ejemplo, el órgano auditor señaló que entre las observaciones de tipo financiero aparecen saldos no ejercidos; cheques expedidos y no cobrados, que carecen de soporte documental; anticipos de sueldos y salarios no recuperados; anticipos a proveedores o contratistas sin amortizar; pasivos sin evidencia de liquidación; y erogaciones sin comprobantes; así como adquisiciones de bienes o servicios sin licitación.

En cuanto a la obra pública, el ORFIS consigna obras sin operar; otras ejecutadas de forma irregular; obras inconclusas; pagos en exceso por volúmenes no ejecutados; y obras con deficiencias técnicas.

Todo un rosario de irregularidades, anomalías y observaciones es el detectado en 195 de los 212 ayuntamientos veracruzanos, así como en 10 entes paramunicipales, organismos operadores de agua; y dos dependencias del gobierno estatal.

@luisromero85