Chachalacas, puerto de Veracruz y Costa Esmeralda registraron las condiciones de “tormenta perfecta” el día domingo y lunes, esto es que el viento sopló en la misma dirección con el suficiente tiempo para generar el fenómeno de inundación costera cómo parte del Frente Frío número 10, explicó el subdirector de Estudios y Pronósticos Meteorológicos de la secretaría de Protección Civil, Saúl Miranda Alonso.

Explicó que en las costas antes mencionadas de Veracruz se registró la llamada marea de tormenta, la cual es variable, y esto puede pasar en cualquier momento que se conjunten los vientos con intensidad, dirección y tiempo para tener tanta fuerza que permita el desplazamiento del mar.

De acuerdo a su conocimiento, el oceanógrafo dijo que es “normal” que la marea de tormenta se presente cuando hay Frentes Fríos, sin embargo causa daños porque los ciudadanos y ciudadanas construyen palapas en zona de playa, cerca de la línea del mar, por lo que lo ideal es no construir en zonas inestables.

Miranda Alonso explicó “El Frente Frío está produciendo el oleaje fuerte hacia la costa, es algo normal de la temporada, hay veces que el oleaje mete sedimento y a veces se lo lleva”.

Este crecimiento del oleaje que se expande en la costa ocasiona problemas a las personas que construyeron sus palapas para comercializar a los turistas, sin embargo, lo que se vio el domingo y lunes es parte de la dinámica natural del mar, dijo el Doctor en Ciencias Naturales con especialidad en Oceanografía Física.

“En general estamos teniendo problemas porque tenemos infraestructura muy cerca de la costa, muy cerca de la línea del mar y se está perdiendo en este caso palapas que son reemplazables; lo correcto es no construir en estas zonas inestables; es la dinámica natural de un mar, y es la temporada de los Frentes Fríos fuertes” finalizó.

Cabe mencionar que los frentes fríos número 9 y 10 ocasionaron un alto oleaje y fuertes vientos en Costa Esmeralda municipio de Tecolutla; en Chachalacas de Úrsulo Galván; y en el puerto de Veracruz.

El mar arrastró las palapas, sillas y mesas instaladas en la playa, lo que generó cuantiosas perdidas económicas para los comerciantes y el retiro de los turistas que llegaron el fin de semana para disfrutar del puente vacacional del 20 de noviembre.

AVC

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