Organizaciones campesinas tomaron el centro de la ciudad para conmemorar el aniversario luctuoso de Emiliano Zapata y para exigir a los gobiernos estatal y federal que atienda las demandas de este sector que denunció el grave rezago en el que se encuentra.

Provenientes de diversos municipios del estado, los campesinos llegaron en camiones y marcharon por el primer cuadro de la ciudad para concentrarse en la plaza Lerdo.

Las demandas van desde apoyo para atender el rezago en apoyos a los cultivos, como la atención a conflictos agrarios e incluso el freno a la instalación de trasnacionales en el estado.

Al hacer uso de la voz, el dirigente estatal de la Central Campesina Cardenista (CCC), Moisés Reyes Fausto, aseguró que los campesinos siguen esperando que se cumplan las promesas de la cuarta transformación.

Dijo que la mejor manera de honrar la memoria de Emiliano Zapata y sus compañeros de armas es poner en marcha políticas públicas incluyentes, encaminadas a hacer más productivo el campo.

“Hay que hacerlo autosuficiente, devolverle el vigor que necesita para preservar nuestra soberanía alimentaria, a promover el desarrollo social de las comunidades indígenas, creando infraestructura comunitaria que nos permita una vida más digna”.

Urgió a garantizar la seguridad personal y patrimonial “no de los mafiosos de la derecha, sino de todos los mexicanos”, pues dijo que la cuarta transformación no puede lograrse desde la comodidad de una oficina con clima, con zapatos sin rastros de polvo y dirigido desde el smart más moderno.

“La cuarta transformación debe traducirse en mayor bienestar para la gente, más empleo y bien remunerados, mayor producción para invertir en la productividad en el campo y mejorar la atención a la salud, más y mejor educación laica y gratuita para todos”.

Exigió respeto absoluto a la autonomía de los pueblos indígenas, culminar con justicia los conflictos agrarios y combatir con rigor los nuevos latifundios simulados, además de proteger los recursos naturales y la biodiversidad.

“El movimiento campesino veracruzano aspira que se respete la palabra empeñada en dos hechos históricos; el 10 de abril en Jerez, Zacatecas, y el 21 de abril en Rinconada, Veracruz; hechos en donde el presidente de la República y el Gobernador de Veracruz, empeñaron su palabra para llevar a sus gobiernos las demandas de los campesinos organizados y hoy aquí decimos que seguimos esperando”.

Acusó que los interlocutores del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, han fallado, porque no han implementado acciones de Gobierno para abatir los grandes rezagos que en materia de seguridad, salud, desarrollo económico y bienestar social de los veracruzanos.

Por su parte, el dirigente nacional de la Unión General Obrero, Campesina y Popular (Ugocp), Luis Gómez Garay, lamentó que no haya una estrategia definida por parte del Gobierno federal ni del estado.

“No hay política agraria hoy en día, tal parece que la nueva generación de Gobierno piensa que los problemas agrarios son de tiempos de la Revolución y más anecdótico, a pesar de que no se han solucionado de fondo los temas que dieron origen al tema campesinos”.

Dijo que la lucha campesina no es “por políticas hipócritas de combate a la pobreza ni por dádivas”, y recordó que Emiliano Zapata, el llamado “caudillo del sur”, no luchó por la entrega de despensas, sino por el progreso y desarrollo integral de las comunidades rurales.

“Paso a paso las instituciones agrarias de México las dejan como meros entes testimoniales; la vieja Secretaría de la Reforma Agraria, hoy Sedatu está en vías de convertirse en una mera promotora del desarrollo urbano mientras los tribunales agrarios y la procuraduría agraria se debaten en la penumbra y las carencias que las han llevado a la irrelevancia”.

Dijo que actualmente existen cientos de expedientes agrarios que no se atienden y por ello no tienen solución decenas de conflictos agrarios que se vuelven violentos ante la inacción de las áreas de gobierno que deberían atenderlo.

“Homenajear a Zapata significa regularizar la tierra y atender las demandas de los campesinos; sin embargo, a 100 años del asesinato de Emiliano Zapata y a 109 años del inicio de la Revolución Mexicana las demandas de Justicia social e integración de los campesinos al desarrollo nacional aún siguen sin ser atendidas en el México contemporáneo”.

Acusó que los más de 35 millones de pobladores rurales de México siguen excluidos del desarrollo social, en un campo mexicano donde campea la pobreza, la falta de oportunidades, los bajos niveles de rentabilidad agropecuaria y la ausencia de empleos competitivos y bien remunerados.

“En este centenario luctuoso Emiliano Zapata convocamos a transformar la política pública en una verdadera estrategia promotora del desarrollo agrario y rural de nuestras comunidades y ejidos; que la estrategia de redistribución de ingresos para el consumo a la población rural sea acompañada de nuevos instrumentos de política pública para el fomento productivo del campo”.

El integrante del Consejo Regional de Café, Cirilo Elotlán, advirtió que este tipo de estrategias tiene el objetivo de hacer a los ciudadanos dependientes de los apoyos del Gobierno del estado para que luego en las elecciones de 2021 los campesinos se vean obligados a apoyar a sus candidatos.

«Es terreno fértil para los votos, nos quieren tener de rodillas y dependiendo de los apoyos del Gobierno».

Dijo que por ello el Gobierno ha insistido en apoyar a los adultos mayores, porque no pueden ya trabajar y pretenden que esos apoyos se conviertan en votos en la próxima elección.

“Con hambre, con enfermedades y necesidades estamos obligados y arrodillados a siempre depender de ellos (…) los jóvenes ya no trabajan el campo pero les van a dar 3 mil 600 pesos para que se dediquen a otra cosa; es terreno fértil para los votos del 2021 y asegurarse para el 2024”.

Perla Sandoval/Avc