En la Cámara de Diputados, legisladores de las bancadas del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), expresaron su preocupación por los sucesos violentos en Oaxaca, donde integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), de organizaciones sociales, habitantes del lugar y policías tanto federales como locales, se enfrentaron.

El presidente de la Mesa Directiva de San Lázaro, Jesús Zambrano, urgió a establecer una mesa de intermediación entre el Gobierno Federal y la CNTE, ello, a fin de poner un alto a la confrontación, que este domingo 19 de junio se agravó hasta dejar un saldo, según las autoridades, de al menos tres muertos; y de acuerdo al magisterio disidente, de seis fallecidos.

El legislador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) subrayó que el diálogo debe ser la vía para resolver el conflicto magisterial.

En una actitud crítica, Zambrano Grijalva cuestionó quién provocó los encontronazos de este domingo y sobre quien recae la responsabilidad por no atender la problemática por la vía del diálogo.

“¿En Nochixtlán, Oaxaca, quién provocó los muertos y quién va a cargar con ellos? ¿Cuántos muertos faltan?”, inquirió.

“El diálogo puede ayudar a encontrar caminos de entendimiento para solucionar este conflicto”, agregó.

“Es necesaria una mesa de intermediación entre el gobierno y la CNTE, porque la confrontación no puede ni debe seguir”, agregó a través de su cuenta en la red social de Twitter, @Jesus_ZambranoG.

Por su parte, el coordinador del PRD y legislador por Oaxaca, Francisco Martínez, que se encontraba en la zona del enfrentamiento, acusó que la policía presentaba una actitud represiva y algunas personas infiltradas entre los manifestantes accionaron armas de fuego, con el fin de agravar la confrontación.

Martínez Neri señaló que en el municipio de San Lorenzo Cacaotepec también hubo enfrentamientos entre policías, maestros y habitantes del lugar que se sumaron a los mentores.

Al enfatizar que los elementos de seguridad locales y federales actuaron en todo momento de manera irracional, exigió que cese la confrontación con las fuerzas policíacas y la autoridad a nivel federal instale la mesa de diálogo que se ha negado a abrir.

El coordinador del Sol Azteca en San Lázaro, subrayó que el Presidente de la República el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Miguel Osorio y su homólogo de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño, deben declarar, de frente a la opinión pública, cuántos muertos más están dispuestos a tolerar, antes de abrir una mesa de diálogo.

Indicó que de acurdo a la Fiscalía General de Oaxaca, hasta la noche del domingo, el número de muertos había llegado a cinco, tan solo en el área de Nochixtlán.

Agregó que en la zona de conflicto, se pudieron ver retenes policíacos, helicópteros de la policía que al sobrevolar la zona, lanzaron gases lacrimógenos y condenó que el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué, no haya intervenido a favor de su pueblo, “porque un gobernador debe defender a su pueblo”.

También por la bancada perredista en la Cámara, el vicecoordinador Guadalupe Acosta, lamentó los hechos referidos y señaló que el estado de cosas obliga invariablemente al gobierno federal a establecer una mesa de diálogo con la CNTE, porque es su obligación escuchar y atender demandas de las organizaciones sociales.

El legislador calificó como «inaudito» que el Ejecutivo Federal y el titular de la SEP se nieguen a dialogar con los inconformes, y sentenció que si esa postura persiste, lo único que lograrán las autoridades federales es “despertar al México bronco”.

Acosta Naranjo se sumó a la condena por la violencia ejercida por los policías federales y estatales que arremetieron contra maestros, integrantes de organizaciones sociales y vecinos en Oaxaca.

Enfatizó que es la hora de sentarse a dialogar con la disidencia magisterial para encontrar una salida a la problemática generada por la reforma educativa, y distender el conflicto.

Agregó que si en otras naciones, los gobiernos dialogan con grupos de inconformes, incluso con representantes de grupos guerrilleros para controlar los brotes de violencia, es “inaudito” que en México el titular del Ejecutivo y el responsable de la política educativa se nieguen a “platicar” con los profesores inconformes.

“La incapacidad del gobierno federal para instrumentar la reforma y su resistencias a establecer el diálogo con quienes se oponen a la reforma en materia de educación está colocando a esta legislación en un callejón sin salida. Su aplicación está entrampada en un conflicto permanente y de lo que menos se habla ahora es de la mejora de la calidad educativa”, criticó.

Recriminó que las autoridades se nieguen a conciliar e insistan “con necedad” en imponer su interpretación particular de la reforma educativa, cuyo propósito era elevar la calidad de la educación, pero ha sido utilizada para tener bajo control al magisterio, sin importar el costo político, social y laboral que ello tenga.

Enfatizó que la reforma educativa debe “arreglarse” con diálogo, sin amenazas, sin despidos y en particular sin represión.

“Si el gobierno de Enrique Peña Nieto y el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, continúan con su errónea decisión de imponer a sangre y fuego su interpretación de la reforma, corren el riesgo de despertar al México Bronco”, insistió.

En tanto, la fracción parlamentaria de Morena condenó la represión de las fuerzas de seguridad  y el gobierno federal contra los integrantes de la CNTE.

Los legisladores de Morena consideraron que las autoridades deben propiciar el diálogo con los inconformes con la reforma educativa; sin embargo, dijeron que ante la falta de capacidad del titular de la SEP, Aurelio Nuño, para resolver la problemática, es necesario que presente su renuncia.

Se declararon “indignados” ante la represión policiaca contra los maestros disidentes calificaron como incongruente que a pocas horas de la puesta en marcha del nuevo sistema de justicia penal, se ordenara el envío de políticas federales para enfrentar a los inconformes con la reforma educativa con gases lacrimógenos, armas de fuego y un proceder violento.

La coordinadora Rocío Nahle catalogó el proceder de la autoridad como un acto de “barbarie” y señaló que el Congreso de la Unión debe intervenir ante la “cerrazón” del Ejecutivo Federal,

 Por ello, se solicitará en el marco de la Comisión Permanente del Congreso, que el Ejecutivo Federal nombre a un comisionado para resolver el conflicto con el magisterio, se conforme una comisión plural para intervenir en el asunto y que la sede del Legislativo sea el espacio para establecer una ronda de diálogo con la CNTE.

Nahle García remarcó que ante la gravedad del asunto, es necesario que el titular de la SEP, quien debería estar ocupado en entablar diálogo con quienes rechazan la reforma educativa, sea destituido.

El Ejecutivo federal debe, nombrar lo antes posible, a una persona capaz de propiciar el diálogo con los maestros, antes que optar por el uso de la fuerza pública para resolver la problemática que ronda a la reforma educativa.

La legisladora recordó que su partido, convocó  a una movilización en favor del magisterio disidente, la cual se llevará a cabo el próximo domingo 26 de junio, a partir de las 11:00 horas y en el Paseo de la Reforma.

Con información de Noticias MVS.