Con 15 periodistas asesinados y 2 desaparecidos en el año 2022, México ocupa el lugar 143 de los 180 países en el mundo más peligrosos para ejercer el periodismo, y uno de los factores que propician este riesgo es la impunidad, ante la falta de judicialización en las carpetas de investigación, indicó la representante de la organización Reporteros Sin Fronteras en México, Balbina Flores Martínez.
Estos datos, se darán a conocer en un informe que Reporteros Sin Fronteras publicará en mayo próximo, adelantó.
“México en nuestra clasificación va a ser terrible, si va a ocupar un lugar que a veces es difícil explicar en el extranjero, porque nos cuestionan ¿Cómo es posible? Que México, un país con democracia y que no está en guerra, tiene más periodistas asesinados que otros dónde sí hay guerra”, explicó.
En el extranjero, cuestionan a las organizaciones defensoras de derechos humanos del por qué hay un número elevado de periodistas asesinados en México, explicó.
“México es uno de los países entre comillas ´en paz´ que tiene más periodistas asesinados. México comparado con países en guerra cómo Irak y Siria tiene más periodistas asesinados. México el año pasado estuvo por encima de Siria e Irak, es muy difícil entender y explicar para el extranjero”, indicó.
Según los reportes de Reporteros Sin Fronteras, la impunidad en la actuación e investigación por parte de las Fiscalías en el asesinato de los periodistas cumple una función relevante.
“Cómo explicar que México un país con democracia y paz haya tantos periodistas asesinados es inconcebible. Son varios factores involucrados, uno es la impunidad”.
El 98 %de los asesinatos y agresiones a periodista en impunidad
Refirió que el 98 por ciento de asesinatos a periodistas están en la impunidad, sin avances en las carpetas de investigación, sin que haya detenidos o castigo para los culpables.
A la impunidad, se le suman que las políticas de protección no todas son integrales o realmente garantizan la seguridad al periodista víctima de atentados o amenazas.
“Si bien el mecanismo de protección tiene 1 mil 600 personas incorporadas entre defensores de derechos humanos y periodistas, bajo su resguardo tiene a 600 periodistas y por lo menos 9 han sido asesinadas aun teniendo un mecanismo de protección”, lamentó.
Agregó que las fallas internas en los mecanismos de protección no han logrado superarse y eso explica la situación de inseguridad en el trabajo reporteril.
Otro de los factores detonantes de las agresiones a periodistas son los contextos generales de inseguridad en México y por citar un ejemplo en el estado de Veracruz no ha desaparecido la violencia,
“Están los municipios de Tezonapa, Coatzacoalcos, Córdoba, que siguen los hechos de violencia” dijo Balbina Flores en su visita a Xalapa para estar presente en el tercer aniversario luctuoso de la periodista María Elena Ferral Hernández asesinada en el municipio de Papantla, al norte de Veracruz, el 30 de marzo del 2020.
Un discurso oficial que confronta
Flores Martínez lamentó que en México se practique un discurso oficial desde la presidencia, que se replica en los gobiernos de los estado para “confrontar, visibilizar, exponer, estigmatizar, y acusar a los periodistas de mentirosos”, lo cual es un generador de violencia hacia está profesión.
Lamentó que el gobierno de Veracruz replique el discurso de confrontación con los periodistas.
“Ese discurso de acusar a los periodistas de mentirosos se replica en los estados y Veracruz no ha sido la excepción, el gobernador ha seguido ese mismo discurso de decirle a los periodistas: ¿Por qué tengo que responder tal cosa? O ¿Dime quién eres?” explicó en su visita a Xalapa.
Por ello, recalcó la defensora, las y los funcionarios y servidores públicos deben saber que al ingresar a laborar a cualquiera de los tres niveles de gobierno, deben estar conscientes que se convierten en “personas públicas” con obligaciones de informar y que en cualquier momento puede recibir criticas o cuestionamientos de los periodistas.
“La función es informar y la de los periodistas es preguntar. El discurso oficial se ha replicado y el caso de Cuitláhuac no es distinto. Hemos visto cómo ha tratado a algunas periodistas, y es una forma de estigmatizar, de agredir a la libertad de prensa, pero ellos no lo ven así; ellos dicen es nuestro derecho, si, si, pero ellos son funcionarios, son autoridad con obligación de informar”, dijo Balbina Flores.
AVC