Tras estudios preliminares, Caminos y Puentes Federales (CAPUFE) trabaja en la construcción de un carril provisional en el tramo Ciudad Mendoza-Acatzingo de la autopista Orizaba-Puebla, afectado por un deslave el pasado 25 de octubre.
Mientras tanto, se evalúan obras definitivas, como la estabilización de taludes, instalación de barreras de contención o la construcción de túneles.
Dado que el terreno continúa inestable y podrían ocurrir nuevos deslaves, la solución inmediata consiste en el hincado de pilotes para contener el material y permitir el paso vehicular en un tramo de al menos 420 metros.
Esta propuesta fue aprobada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien instruyó su pronta ejecución.
El director de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) en Veracruz, Luis Antonio Posada Flores, detalló en conferencia de prensa que se han contabilizado 150 mil metros cúbicos de material deslizado, atribuyendo la deforestación como una de las principales causas.
Brigadas de CAPUFE han realizado pruebas geológicas, geofísicas y topográficas, además de medir grados de humedad e inclinación del terreno, para garantizar una reapertura segura una vez que terminen las labores de rescate de los vehículos siniestrados.
El objetivo de esta intervención es agilizar el tránsito, reducir la carga en rutas alternas y optimizar los tiempos de traslado, aunque el tiempo necesario para completar las obras es aún indefinido.
AVC
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