Se encendieron las alarmas en el Centro de Alta Especialidad Dr. Rafael Lucio de esta ciudad capital, al presentarse durante esta semana la muerte de una joven mujer por tuberculosis. Contrario a lo que muchos piensan, la enfermedad nunca se ha ido, este año lo iniciamos con casi 20 mil casos en el país. En el 2023, Veracruz llegó a ocupar el primer lugar nacional en casos de tuberculosis. Lo preocupante aquí, es el nulo seguimiento que se le da a la familia y aquellas personas que tuvieron contacto con la fallecida, además de haberlos dejado ir sin hacerles los estudios correspondientes para descartar la portación de la bacteria. Al igual que el COVID-19, la cadena de contagio puede ser muy grande si consideramos la alta capacidad para infectar y la enorme falta de atención de las autoridades sanitarias. Valdría al pena preguntarle a quienes dicen dirigir el área de la salud en el estado, las medidas que tomarán en este caso antes de que se propague la enfermedad entre la población.