La Universidad Veracruzana (UV) y la Fundación para las Letras Mexicanas (f,l,m.) reciben –del 19 al 30 de junio– a escritoras y escritores del país que participan en la decimoquinta edición del Curso de Creación Literaria para Jóvenes, un encuentro en el que compartirán experiencias con sus pares, conferencistas y talleristas que orientarán y guiarán su inquietud creadora en los géneros de poesía, ensayo, narrativa y dramaturgia.

“El objetivo del curso es que las y los participantes adquieran nuevas técnicas de escritura observando, desmenuzando, practicando, compartiendo, siempre con la orientación y asesoría experta de autoras y autores altamente reconocidos”, declaró Juan Ortiz Escamilla, secretario Académico de la UV, al inaugurar el curso en el Salón Azul de la Unidad de Humanidades.

En su mensaje felicitó a las y los participantes provenientes de los estados de México, Baja California, Jalisco, Veracruz y Aguascalientes, y subrayó que el curso ofrecido por la UV y la f,l,m. no habría sido posible si no se creyera que pueden enseñarse muchos principios de la escritura creativa.

Desde 2009, año en que se puso en marcha este programa, el punto de partida ha sido proporcionar pistas a jóvenes escritoras y escritores mexicanos de cómo y por qué funciona la buena escritura en sus diferentes géneros, comentó.

“La idea no es ensalzar la excelencia como si se estuviera organizando una competencia ni reducir la creación literaria a un marco normativo de fórmulas y recetas, se busca estimular el pensamiento, la conversación cultural y abrir un espacio para que voces literarias emergentes compartan su forma de ver y leer el mundo.”

“UV preserva la vocación vinculada a las humanidades y el amor a la literatura”: f,l,m

Miguel Limón Rojas, presidente de la f,l,m., expresó que la “Universidad Veracruzana preserva la vocación vinculada a las humanidades y el amor a la literatura”, durante la apertura del curso con tres lustros de antigüedad, y 20 del organismo que preside, misma que debe su existencia al legado literario del poeta y escritor mexicano Octavio Paz.

Con este compromiso han impulsado el desarrollo de actividades diversas y programas variados relacionados con el arte de la palabra, que encara la misión de impulsar y brindar aliento a los nuevos escritoras y escritores, quienes sienten ser poseedores de esta vocación.

En ese caminar, destacó la vinculación con la UV, institución a la que elogió por su añeja tradición y devoción a la literatura, pues por sus aulas han pasado muchos estudiosos, críticos, lectores y escritores.

“Ése es el motivo por el cual pensamos construir este programa realizado año con año, y que ni la pandemia pudo interrumpir.”

Al dirigirse a las y los participantes, Limón Rojas les recomendó humildad ante el hecho de sentirse escritores y escritoras en potencia.

“Esa no es la posibilidad de escalar a un nivel superior de lo humano, sino que se trata de emprender un oficio que resulta placentero, que nos da nutrientes espirituales sin los cuales no queremos vivir, y esa diferencia es algo que merece nuestra lealtad, dedicación y perseverancia.”

Por su parte, Juan Pablo Rojas Texon, director de la Facultad de Letras Españolas de la UV, habló sobre el arte de la palabra como un medio de expresión, comunicación, y un recurso de exploración y reconocimiento.

También, se refirió a la literatura como algo sagrado, así como a la vocación y elección por el arte de la escritura de la que muchos escritoras y escritores advierten de las dificultades a las que se enfrentan, más aún si su gusto está basado en el reconocimiento, premios y regalías.

“No significa que estos beneficios sean en sí mismos nocivos, hay unos cuantos escritores –pocos a decir verdad– que los consiguen, si entrar por ello en contradicción alguna, pero creo que no deberían ser la meta en el ejercicio de la creación literaria; la inefabilidad de la vocación radica precisamente en eso, en mantener activo a un escritor al margen del éxito editorial.”

Más bien, dijo, la disciplina es algo que ha de alimentar la vocación, y con el tiempo, tras largos periodos de trabajo duro, devendrá en la satisfacción personal de saber que se hace lo que a uno más le gusta.

“Hacer literatura es ya la recompensa de quien decide transitar por dicha ruta, porque escribir implica dedicar un tiempo para estar consigo mismo.”

Frida Maya Guzmán Oliva, estudiante de la Facultad de Letras Españolas UV y participante del curso, dio la bienvenida a sus pares de otros estados del país y también reflexionó sobre la vocación y el momento oportuno para hacerse llamar escritoras y escritores.

“Me he dado cuenta de que la mayoría del tiempo pensamos que son unos zapatos difíciles de llenar, no nos atrevemos a autonombrarnos porque no hemos publicado lo suficiente, lo abandonamos a ratos, no hemos producido lo necesario, o porque no nos parecemos a quienes leemos, o porque el hábito de escribir es, como menciona Virginia Woolf, una hazaña de la que no siempre salimos victoriosos.”

”Es curioso observar cómo es que, desde nuestra posición como jóvenes que buscan contar historias desde las letras, creemos que sólo somos lectores que a veces escriben, no somos escritoras y escritores, pero le dedicamos gran parte de nuestra vida a la escritura, no lo somos pero tenemos un interés casi obsesivo en las palabras”, resaltó.

En el presídium también estuvieron: Yolanda González Molohua, Roberto Zenteno Cuevas y Eduardo Reyes Langagne, directores del Área Académica de Humanidades, de Investigaciones, y de la f,l,m., respectivamente, así como Sandra Lorenzano, poeta y ensayista.

AVC

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