Prefacio.
Mientras no asomaba la cabeza, mientras sus apariciones públicas se limitaban a hablar de sus programas, nadie lo volteaba a ver. *** Todo fue cuestión de que se metiera en un absurdo debate mediático con el alcalde de Xalapa, para que sus enemigos –que no son pocos- apuntaran hacia la figura del “super-delegado” Manuel Huerta Ladrón de Guevara. *** Plumas reconocidas por su entusiasmo para perseguir las “exclusivas”, o ser los primeros en dar “la nota”, se dieron vida recreando un escenario fantástico: que Manuel Huerta dejaba su cargo y que, justo en el momento en el que daban la noticia, se realizaba el procedimiento de entrega-recepción. *** Todo fue cuestión de hacer un par de llamadas (nunca sólo una, pues la noticia se verifica y se confirma a través de diversas fuentes) para encontrar que no era más que otro “borrego” de alguno de esos ociosos a los que el delegado federal no les cae muy bien. *** De hecho Manuel Huerta concentra en estos momentos toda su atención en la próxima visita del presidente, al sur de la entidad, para revisar obras en aquella zona, y –quizá- para desmentir a quienes sugirieron que su cambio de sede en la celebración del Día de la Marina (se realizaría el primero de junio en Coatzacoalcos, pero se movió a la Ciudad de México), haya tenido que ver con expresiones de protesta que se preparaban para recibirlo.
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A pesar de que en su momento a las autoridades de Veracruz se les demostró que la figura delictiva de “ultrajes a la autoridad” violentaba principios fundamentales consagrados en la Carta Magna, hicieron caso omiso.
Para ellos era bastante cómodo capturar con ese pretexto a quien quisieran y, con la complicidad del Poder Judicial del Estado (PJE) mantenerlos en prisión, aunque fueran inocentes.
Los argumentos jurídicos, aunque muy sólidos, eran insuficientes para convencer a la administración estatal de que estaba cometiendo, de forma reiterada, abusos de autoridad y violaciones a los derechos humanos.
La argumentación de los especialistas en derecho requería de algo más. Fue ahí donde intervinieron actores políticos que fueron capaces de llamar la atención de la más alta tribuna judicial del país –la Suprema Corte de Justicia de la Nación- donde sí fueron escuchados los argumentos jurídicos, analizados y considerados al momento de emitir una sentencia.
Hay quienes creen que con acusar que un asunto “se politiza” lo están descalificando. No es así.
Los actores políticos intervienen cuando se hace evidente la falta de voluntad de las autoridades para atender un reclamo justo.
El gobierno estatal no tiene argumentos para descalificar el acompañamiento jurídico y social que han recibido los padres de Viridiana Moreno, la joven desaparecida el pasado 18 de mayo en la ciudad de Cardel.
El abogado Tomás Mundo Arriasa, quien asumió su representación, tiene un reconocido prestigio, mientras que la organización “Red de Mujeres Defensoras de la Paridad en Todo” tiene representaciones en todo el país y abriga en sus filas a mujeres con las más diversas posturas políticas, a damas que son líderes en sus sectores y activistas por la defensa de la paridad de género.
De pronto a muchos se les olvida que el meollo del asunto es la desaparición de una mujer (una más, en un estado que se destaca por la recurrente violencia contra el género femenino) y esas organizaciones, surgidas desde la sociedad civil buscan, precisamente, hacer visibles todos estos casos, brindar acompañamiento a las víctimas y exigir a las autoridades, de los tres niveles de gobierno, que responda como corresponde a sus obligaciones.
La exigencia de la familia es la más natural, la que haríamos cualquiera de nosotros si nos encontráramos en una situación similar: quieren que les demuestren, sin lugar a dudas, que los restos que les mostraron corresponden a su hija. No los satisface el argumento de que “era los únicos restos que se hallaron” y que, por lo tanto, deben corresponder a Viridiana.
Y quieren que alguien les explique porqué desde el propio gobierno estatal se difundió la versión de que Viridiana estaba “resguardada”.
¿No pedirían ustedes lo mismo?
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Epílogo.
Ya apareció otro presunto autor material del homicidio de las periodistas Yesenia Mollinedo y Sheila Johana García. Se trata de un sujeto al que las autoridades identifican como Víctor Manuel y lo apodan “El Calaco”. *** Esta es la tercera persona a la que la Fiscalía de Veracruz le atribuye la coautoría material del crimen ocurrido el 9 de mayo. Al primero que señalaron fue a Antonio de Jesús, alias “El Mara”, a quien confundieron con joven estudiante del Tecnológico de Xalapa, a quien tuvieron que soltar cuando se demostró que se trataba de un homónimo. Luego fue Armando, alias “El Traxcavo”, quien ya fue vinculado a proceso. *** La Secretaría de Salud retornó a la presentación de un reporte técnico diario sobre el avance de la pandemia de Covid-19 en el país. *** Este miércoles el número de casos positivos confirmados fue de 5 mil 245. El número de defunciones confirmadas este día en México fue de 13. El total de casos positivos confirmados en México asciende ya a 5 millones 802 mil 672, y el total de defunciones confirmadas en México por Covid-19 es de 325 mil 055.
filivargas@nullgmail.com
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