En el Día Mundial del Corazón es importante reflexionar acerca de los hábitos que podrían mejorar la salud cardiaca, vital para una óptima existencia.

Pequeños pero significativos actos pueden mejorar la salud del corazón, ya sea aumentar la actividad física o mejorar la alimentación.

Profesionales de la salud de Mayo Clinic realizaron un plan para un corazón saludable, el cual puede consultarse completo en el libro Plan para un corazón saludable de por vida.

Uno de los primeros consejos es “comer 5”, es decir, cinco porciones de frutas y vegetales por día para reforzar la salud del corazón.

Es importante incluir desde el desayuno porciones de fruta y verdura, también en las colaciones, en las que se podrá incluir una pieza de fruta o vegetales.

Mayo Clinic recomienda no preocuparse mucho por los alimentos que no se deben consumir, sino concentrarse en comer cinco porciones o más de frutas y vegetales por día.

“Moverse 10”, es otro de los consejos que destacan entre las recomendaciones para tener un corazón más saludable.

Agrega al menos 10 minutos de actividad física de intensidad moderada a tu rutina diaria, porque aunque las recomendaciones generales de salud recomiendan 30 minutos o más por día, 10 minutos hacen la diferencia.

Según estudios, con solo 60 a 90 minutos de actividad física por semana se puede reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardíaca hasta un 50 por ciento.

Además de comer y hacer actividad física, dormir bien es vital para el corazón, pues la calidad y cantidad del sueño, ayudarán a evitar las enfermedades cardiacas.

Durante dos semanas, trata de tener ocho horas de sueño de buena calidad. Aunque las necesidades de sueño de cada persona varían ligeramente, pero ocho es un buen número.

Este es un buen plan para empezar a cuidar el corazón y puede ir evolucionando conforme a las necesidades y capacidades de cada persona.

Pero como bien señala Mayo Clinic, en este Día Mundial del Corazón, es importante empezar con algo, por más simple que sea.

AVC

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