La pandemia de Covid-19 que desaceleró el crecimiento de la mayoría de los sectores económicos llegó en un mal momento para los proyectos del despliegue de la red 5G en América Latina. En específico, en nuestro país, se calcula que cobrará una “factura” de al menos tres años de retraso para al menos poder ver planes tangibles.

“Nos pesca en muy mal momento, estimo que la pandemia, así terminara hoy, nos estaría representando un retraso aproximadamente de tres años en la adopción de 5G. Tres años es una eternidad en tiempo tecnológico”, señala Ernesto Piedras, de la casa de análisis CIU, para Forbes México.

Detalla que a pesar de los planes de diversas empresas por echar a andar negocios para la ejecución y despliegue de la red, han tenido que pausarlos por los altos costos que conllevan.

“No les da la chequera para la caída del negocio que tienen y además que desplegar esto tiene altos costos adicionales”, dice.

Se calcula que el despliegue de la red 5G generará un impacto económico y social de aproximados 730,000 millones de dólares (mdd) en México para el año 2035, distribuido entre varios sectores, dentro de los cuales destacan las tecnologías de información y comunicaciones (TIC), con 137,000 mdd; manufactura, con 134,000 mdd; servicios, con 113,000 mdd; comercio, con 75,000 mdd; bienes raíces, con 52,000 mdd y el de construcción, con 51,000 mdd, según datos recabados por las compañías Nokia y Omdia.

Dentro de todo este despliegue que se requiere para hacer realidad los proyectos de 5G y ver los resultados de las altas velocidades que presume esta tecnología, las frecuencias y los espectros deben estar listos, lo cual para el analista es otro de los retos a seguir.

“Ni está el espectro listo y licitado porque necesitas otras frecuencias, 5G corre en otras frecuencias no en las de 3G o 4G. En número concretos yo te diría que entre 2 años y medio y 3 que nos va a retrasar así hoy terminara la pandemia, porque tendría que venir el proceso de licitación, reconstitución de los planes de negocio de los operadores, etcétera”, dice.

Señala que el país actualmente corre a una velocidad aproximada de 3.6G y no alcanza siquiera 4G en su totalidad, lo cual hace que estos retos sean todavía mayores.

“Voy a hacer una aritmética que no es estrictamente válida, pero si consideras que en el país todavía hay redes 2G, más las 3G, más las 4G, México en realidad es un país 3.6G, no alcanzamos a nivel nacional ni siquiera a tener 4G y lo vemos hasta en el display de nuestros dispositivos”.

Crearán Comité 5G

Hace unos días, el comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) Javier Juárez Mojica señaló que es necesario que México transite de una manera ágil a las nuevas tecnologías, entre ellas las llamadas de quinta generación, si no podría correr el riesgo de quedarse atrás en la carrera 5G.

“Debemos transitar a la quinta generación de servicios móviles. Creo que es uno de los grandes retos que tenemos por delante. No podemos darnos el lujo de no fomentar esa tecnología, quedaríamos atrasados, seríamos menos competitivos respecto al resto del mundo y creo que ahí debemos de enfocar nuestra batería como reguladores”, señaló Juárez Mojica en su participación en el MediaTek Mobile Latam Congress.

Piedras asegura que no todo está perdido y no hay que descartar que en algún momento algunas compañías echen a andar pruebas pilotos o proyectos beta de 5G en México.

“No descarto que en algún momento, por ejemplo, Telcel, haga el anuncio que hizo pruebas o AT&T, siempre se están haciendo pruebas técnicas no comerciales. No sería extraño que de repente anunciaran que ya se hicieron pruebas y empiecen a lanzar en algunos puntos, pero no se trata de lanzar en algunos puntos sino a nivel nacional”, señala Piedras.

Sectores beneficiados

De acuerdo con los datos de Nokia y Omdia, en el caso particular de México, el sector manufacturero será el primero en implementar y beneficiarse de 5G, y específicamente la manufactura de automóviles y autopartes será la que tome el liderazgo.

“Hoy en día, México es el principal fabricante de autos en América Latina y el cuarto a nivel mundial con una producción anual de 4 millones de unidades, de las cuales el 82% es exportada a otros países”, detalla el estudio colaborativo de ambas compañías

La entrada en vigor del T-MEC entre México, Canadá y Estados Unidos obliga a las empresas a realizar cambios en las líneas de producción, lo que se convierte en una oportunidad para la implementación de proyectos de transformación digital de manera simultánea. Otra de las ventajas de este sector es su concentración en algunas ciudades, lo que facilita el despliegue de redes 5G.

Otras áreas de manufactura que podrían convertirse en casos de uso pioneros de 5G en México son los sectores aeroespacial, de equipos médicos y de equipo de transporte.

Forbes

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