Cuando sólo restan tres días para terminar la campaña electoral por la PRESIDENCIA MUNICIPAL de Jáltipan, Mario Cambranis Torres, candidato de la alianza VA POR MÉXICO tiene una certeza: en los primeros 100 días de su gobierno concentrará su atención en tres colonias de la cabecera municipal: Murillo Vidal, Ferrocarrilera y la Deportiva. No obstante, tiene claro que hay rezagos que deben atenderse con urgencia en las congregaciones de la Isla de Tacamichapan y sabe que los retos que enfrentará nos son sencillos, pero tiene confianza en que su proyecto se cristalizará.

Los jaltipenses convertirán a Mario Cambranis Torres en el próximo presidente municipal. Y lo harán porque saben que es el candidato mejor preparado para darle viabilidad y progreso al municipio, porque saben que es único político que tiene amplias relaciones personales y profesionales con el estado y la federación para atraer inversiones privadas y recursos públicos que permitan reactivar la economía del municipio.

Mario Cambranis Torres ha logrado en 26 días de caminar por todos los rincones de la ciudad y sus congregaciones, palpar y sentir las necesidades de la población.

Conoce perfectamente cuáles son las demandas más sensibles de la sociedad y sólo requiere que el próximo domingo 6 de junio le brindemos nuestro voto y nuestra confianza para comenzar a vivir una nueva realidad.

Ayer, al caminar de nueva cuenta por la colonia Ampliación Este Deportiva, Celia Peregrino Ramírez, quien vive en el número 1407 de la calle Hidalgo, le dijo a Mario que cuenta con su voto y con el de su mamá y que espera que él, finalmente, concluya la pavimentación de su calle y de la calle Revolución. “Hace seis años, el PAN introdujo el drenaje y el agua y por eso nosotros votaremos otra vez por el PAN, porque siempre han trabajado por nosotros y por nuestra colonia”.
A su vez, la señora María Ruth Mexicano Francisco, vecina del callejón Atletas le pidió a Mario que “siga como hasta ahora, caminando y hablando con la gente”, que comience a dar resultados y que esté tranquilo “porque nosotros lo vamos a apoyar”.

En la colonia Deportiva, Mario se topó con un tío: Mariano Guerra. Primo de su mamá. Hombre recio que se siente sumamente orgulloso de su sobrino, “pero también de Enrique. Él es el que más se parece a su abuelo, grandote, fuerte, es igualito”, comenta a quien esto escribe el tío Mariano, quien celebra en casa a su esposa que cumple años.

–“¡Pásenle, pásenle todos!”, nos dice a la comitiva, entusiasta el tío
Y nos metemos. Saludamos y Mario se acerca su tía Lina y le brinda sus respetos y le desea un feliz cumpleaños. La comitiva le echa una porra a la tía y le desea un feliz aniversario. Don Mariano nos pide que nos sentemos y que comamos y bebamos, pero Mario le dice que no podemos porque tenemos que seguir caminando, sin embargo, agradecido le expresa su aprecio a Mariano Guerra, con quién me pongo de acuerdo para regresar a su casa y platicar con él sobre los recuerdos que guarda de Don Gilberto Cambranis, padre de Mario, Enrique, Aurelio y Julián y el hombre quién les infundió y les enseñó a buscar el bien común, servir a la sociedad y ayudar siempre a su comunidad, para cambiar el rostro de Jáltipan, de Veracruz y de nuestro país.
Unos metros adelante ya sobre la calle Atletas, Mario platicó con Doña Trinidad Bustamante Ramírez, quien con una gran sonrisa que deja ver su único diente recibe al abanderado a la puerta de su domicilio…

–“Hola Mario, segura estoy que tú ni te acuerdas pero yo trabajé para tu mamá y a ti, a Aurelio y a Enrique yo los cuidaba, los atendía y estuve pendiente de ustedes los cuatro años que ayudé a Doña Rosita…”

Mario se queda sorprendido de la revelación y agradecido de las palabras de afecto a su madre.
—“Me dio mucha tristeza cuando murió. Era tan joven, muy joven…”

Doña Trinidad le ha dicho a Mario que sobra que le pida su voto, puesto que ya lo tiene. Al escribano, la Doña le comenta que Don Cambranis, padre de Mario, “era guasero, le gustaba hacer guasas y tenía un carácter agradable. Doña Rosita era muy buena patrona, siempre andaba peleando con sus hijos, porque eran remilgosos con la comida, andaba detrás de ellos para que se comieran lo que les preparaba…”

La jornada 26 del candidato a presidente municipal de la alianza VA POR MÉXICO termina ya cuando la noche nos cubre con su manto. El clima por fortuna no es tan bochornoso y la caminata aunque ha sido extenuante deja las fuerzas suficientes para que la comitiva mantenga el ánimo hasta lo más alto. Una porra más para Mario resuena en la calles de la colonia Benemérito de Las Américas.

Conéctate con Formato Siete:

APUNTES | Se cayó el soberbio