Quienes tengan alrededor de 40 años probablemente recuerden al Tamagotchi, una adorable mascota virtual a la cual había que alimentar, bañar, poner a dormir y, en definitiva, cuidar como se cuida a cualquier ser vivo. Se puede considerar una versión retro de Pou, el personaje de esta década que tiene esa misma lógica. La diferencia es que en aquel entonces el Tamagotchi vivía en una suerte de llavero portátil en tanto que el Pou, como casi todo en este mundo virtual, vive en el móvil.

La novedad es que Bandai, creadora del legendario juego, volví a lanzar el Tamagotchi pero en una versión renovada, y más afín a la impronta de estas épocas. Integra una cámara y otras funcionalidades interactivas.

Casi 25 años después de su primer lanzamiento en el mercado, y con más de 82 millones de unidades vendidas en todo el mundo, la compañía japonesa presentó ayer este novedoso dispositivo.

Ahora, la compañía mejoró las opciones de juego para potenciar la interacción y las funcionalidades, adaptadas a las nuevas demandas del público infantil.

Con el nuevo dispositivo se introduce la posibilidad de pintar, cocinar junto con este compañero virtual o de moverse por el mundo real para descubrir y conocer nuevos amigos Tamagotchi. Esto es posible gracias a que incorpora por primera vez una cámara, con la que los usuarios podrán sacarse fotografías y guardarlas como recuerdo de sus aventuras en un canal social propio e integrado.

La forma en que se eduque a Tamagotchi sigue siendo importante, ya que afectará la jugabilidad de una manera completamente nueva con la configuración de salas personales o determinando la futura profesión de la mascota cuando regrese a su planeta.

Tamagotchi Pix no necesita conexión a Internet, y permite conectarse con el Tamagotchi de un amigo mediante un código QR, para jugar juntos y enviarle regalos. A partir de agosto, además, permitirá conectarse ‘online’ para ampliar la experiencia con nuevas misiones, objetos y regalos.

El nuevo juguete digital puede configurarse en varios idiomas, incluido el castellano, y ya está disponible en preventa, en dos colores: rosa y morado.

INFORMACIÓN/INFOBAE

APUNTES | Los periodistas son eternos