El secuestro del ambientalista Miguel Vázquez Martínez tiene un sesgo político, denunció el integrante de La Asamblea Veracruzana de Iniciativas y Defensa Ambiental (La vida), Guillermo Rodríguez Curiel, que junto con otros defensores se manifestaron afuera de las instalaciones de la Unidad Especializada Contra el Secuestro (UECS).

Al cumplirse dos meses del secuestro, acusó que la Fiscalía General de Veracruz (FGE) no tiene avances en el caso y sus captores dejaron de comunicarse con la familia cinco días después de su plagio.

Señaló que al principio les exigieron el pago de una suma exorbitante para liberarlo, pero luego fueron bajando el monto hasta que ya ni siquiera se comunicaron con ellos.

«Sostenemos que es un secuestro político porque inicialmente los secuestradores pidieron una suma muy alta de rescate y luego esa cantidad la bajaron al diez por ciento hasta que se rompió el contacto porque la familia exigió la presentación de Miguel con vida para hacer la entrega del rescate».

Narró que el pasado 20 de octubre, alguien contactó a Miguel para decirle que estaba interesado en comprar naranjas de sus tierras y con eso en mente se reunió con ellos y se subió a la camioneta.

Recordó que aunque la familia entregó a la Fiscalía el video en el que se observa el momento en que se sube al automóvil no hay avances, a pesar de que la unidad fue encontrada días después.

Ante ello, dijo que es el ejemplo de que el secuestro de Vázquez Martínez tiene un trasfondo político, ya que dijo ha sido un férreo opositor a la instalación de proyectos extractivos como las mini-hidroeléctricas en Tlapacoyan.

Además, acusó que tras el secuestro la Fiscalía le pidió a la familia no dar declaraciones a medios de comunicación, pero que ante la tardanza y dilación es urgente que se dé con su paradero.

AVC

Conéctate con Formato Siete:

ESPECIAL | Debemos cambiar la mentalidad si queremos limpiar la casa: Isabel Romero