“Voy a participar para pacificar y para que la gente esté feliz” Ricardo Ahued Bardahuil

Como nos lo ha demostrado, el presidente Andrés Manuel López Obrador no es hombre de reacciones rápidas, lo que hace, en términos de aplicación de la justicia, es resultado de análisis cuidadosos en los que incluye los tiempos. Obviamente, toma en cuenta los compromisos que tiene y considera sobre todo las consecuencias que pudiera tener contra su proyecto político, una decisión importante como sería, por ejemplo, la detención del expresidente Enrique Peña Nieto, a quien la sociedad pero, sobre todo, los 30 de millones de mexicanos que votaron por AMLO, están exigiendo que procese por todos los actos de corrupción en que incurrió y los que permitió, lo que llevó a la bancarrota al país.

Nosotros pensamos que difícilmente López Obrador se aventaría un trompo de este tamaño a la uña; el pacto que solo los ciegos no pueden ver, que tuvo con Peña para acceder al poder sin problemas a cambio de impunidad, le impiden actuar y de tonto no tiene un pelo el tabasqueño.

Pero hay otras fichas a las que sí está dispuesto a enjuiciar para garantizar la marcha de su proyecto; una de ellas es el exgobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, a quien responsabilizan de todas las atrocidades que están pasando en la entidad como parte de una estrategia de desprestigio que realiza con tal de tumbar a Morena del poder y tomar debida venganza de la derrota que le infringieron en las urnas, lo que le está costando la muerte política y de paso mucho tiempo fuera de esta actividad a sus hijos Miguelito y Fernando.

¿Cómo parar y tratar de revertir el daño que ha causado Yunes Linares a la administración de Cuitláhuac García?… Activando uno de los tres expedientes que tiene pendientes en la Fiscalía General de la República, y bote, lo que sería altamente rentable en términos de simpatía y confianza en el gobierno de Morena en Veracruz y a nivel nacional en el de AMLO.

Y uno de los puntos finos sobre el que se trabaja en la FGR para actuar contra el exgobernador panista son los 350 millones de pesos enviados por la Federación para el Programa de Cámaras de Vigilancia en el Estado durante el ejercicio fiscal de 2018, el cual tiene serias observaciones por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

Estos recursos, utilizados durante el bienio de Miguel Ángel Yunes Linares como gobernador de Veracruz, alcanzan un monto observado de 349.8 millones de pesos relacionado con importes por aclarar. El concepto de irregularidad asociado con un posible daño o perjuicio a la Hacienda Pública Federal se vinculó con la adquisición de bienes no localizados durante la verificación física realizada en la auditoría por 349.8 millones de pesos, que significó el 100 por ciento de los recursos observados, detallan datos de la Auditoría de Cumplimiento: 2018-A-30000-19-1583-2019 del Tercer Informe Individual del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2018.

Todo está listo para poner en acción el operativo aprovechando los hechos violentos de la zona centro del estado, que tienen acaparada la atención de los veracruzanos y el temor a circular por las carreteras de Veracruz. Activarle a Yunes en estos momentos una orden de aprehensión sería ideal para que Morena recupere bonos perdidos.

Gómez Cazarín, el político pragmático

No es necesario contar con una larga carrera dentro de la actividad política para acreditar capacidad. Hay personas que han pasado la vida militando en un partido, haciéndola de todo y a la hora de la hora no han servido para nada. Pero cuando se tiene el sentido común bien desarrollado y se actúa con pragmatismo, es posible hacer un buen papel desde un importante cargo como es el caso del actual presidente de la Jucopo, el diputado Juan Javier Gómez Cazarín, uno de los más importantes puntales del gobierno de Cuitláhuac García y, en general, de la causa morenista en Veracruz.

Y vean si no: Luego de condenar el asesinato de dos policías estatales y dos municipales de Córdoba, el diputado Juan Javier Gómez Cazarín afirmó que esta serie de ataques registrados en Huatusco y Córdoba es muestra de que Veracruz no cederá su territorio a la delincuencia, como ocurría en el pasado… Eso es todo, sentido común, no meter en problemas al titular del Ejecutivo, al contrario, tratar a toda costa de librarlo sin decir incongruencias como lo hacen otros colaboradores del Ejecutivo, quienes con sus tonterías dan la impresión de tratar de tumbarlo y no de ayudar a la causa.

Gómez Cazarín afirmó que “la reacción del crimen organizado en esta serie de ataques es muestra de que hoy Gobierno del Estado no negocia con grupos delictivos, hay un combate frontal contra quienes son generadores de violencia, contra quienes infringen la Ley, a través de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, con el respaldo de Secretaría de Marina Armada de México, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional”.

Pero, además, en un desplante de institucionalidad, el presidente de la Jucopo expresó la solidaridad del Congreso de Veracruz con los elementos de la Fuerza Civil, de la Secretaría de Seguridad Pública y de la Policía Municipal de Córdoba, que fueron objeto de ataques directos desde la madrugada de este sábado, lamentando además que cuatro elementos perdieran la vida. Desde la Legislatura local, dijo, seguiremos trabajando junto con el gobernador Cuitláhuac García Jiménez para fortalecer a la Secretaría de Seguridad Pública, generar mejores condiciones operativas y presupuestales para que los elementos cumplan con su loable función a favor de la sociedad veracruzana.

Y para cerrar con broche de oro, Gómez Cazarín se comprometió: “como integrantes de la LXV Legislatura local y como bancada de Morena, seguiremos respaldando al gobernador Cuitláhuac García Jiménez en las acciones coordinadas con las fuerzas federales para lograr la reconstrucción de la paz en Veracruz. Que no haya duda alguna, no se tolerarán a los grupos delictivos ni habrá impunidad a quienes generan violencia y zozobra en la sociedad”.

Ricardo Ahued al quite

En estos tiempos de políticos devaluados, de personajes que se han enriquecido escandalosamente en el servicio público, de desconfianza en quienes se dedican a la política, resulta raro o sorprendente que uno como Ricardo Ahued Bardahuil, ex Senador de la República y Administrador General de Aduanas en el gobierno de AMLO, levante tanto revuelo cuando viene a Veracruz, platique con los periodistas a quienes siempre ha mostrado respeto, y con la sinceridad que le caracteriza, hable de lo que está pasando y de sus proyectos políticos futuros.

Estuvo el fin de semana en Xalapa y habló de la falta de recursos del gobierno del estado para cumplir con los compromisos de los empresarios, de esos compromisos que dejaron pendientes de pago Javier Duarte y luego Miguel Ángel Yunes Linares. Ahued lamentó que por esta situación «muchos empresarios están a punto de quebrar o cerrar y tampoco es sano para nadie porque se deja sin empleo a varias personas. Si han sido atendidos, tal vez no han tenido la respuesta total».

Habló de que desde su posibilidad, podría solicitar a la Secretaría de Hacienda que considere otorgar fondos específicos para solventar los adeudos que tiene el Gobierno del Estado con las empresas, sin dejar de mencionar que será necesaria la ayuda de la Federación cuanto antes.

Y se comprometió: «Si tenemos la oportunidad de acercamos al Presidente y pedirle auxilio, lo haremos con todo gusto, para el bien del Gobernador y para el bien de los empresarios que están en derecho de su demanda justa».

Y ya en el terreno político, Ricardo Ahued no se descartó para un nuevo cargo público en Veracruz: «Si es para bien, oigan lo que digo, si es porque estoy en perfecto estado anímico y estoy seguro que contaré con el respaldo de la gente pero que sirva para pacificar al estado, para que la gente esté feliz, para que haya seguridad, para que haya empleos, pues tomaré cualquier cargo. Para estorbar, créanme que lo hago en mi casa muy bien, ya aunque me pongan a barrer».

Y añadió: “Fíjense que cuando me hacen esa pregunta, me he tragado mis palabras muchos años, cuando fui presidente municipal dije que ya acababa mi carrera, luego fui diputado federal y dije ya no quería nada, luego a la local y ya no quería, ya estoy en el Senado y luego vine a dar acá a la (Administración General de Aduanas), entonces para no hacer el ridículo, no sé que me depara, lo que Dios me depare, si estoy vivo, sano, contento y si estoy capacitado para asumir un cargo, lo haré con todo gusto»…

Y sí, Ahued es, de los políticos de Morena, el que mejor perfil tiene, el que más experiencia ha abrevado, el que hace “clic” con la sociedad, con gran facilidad.

Reflexión
Tras depositar el segundo pago a la UV de parte de la Sefiplan, en un comunicado la Universidad Veracruzana reconoce la voluntad, esfuerzo y su política de austeridad y manejo presupuestal del gobierno del estado. La rectora Sara Ladrón de Guevara firma dicho comunicado, en el que también destaca la vocación académica y social del gobernador Cuitláhuac García Jiménez.

Escríbanos a mrossete@nullyahoo.com.mx | formatosiete@nullgmail.com.mx