Durante los años recientes, las empresas dedicadas al transporte ferroviario en México se han referido con preocupación a la inseguridad que afecta al sector.

Cada reporte de seguridad del Sistema Ferroviario Mexicano consigna una realidad muy parecida: siniestros, robo y vandalismo.

Las empresas más afectadas por este problema son Ferromex, Ferrosur y Kansas City Southerm, pero en general, prácticamente todos los sectores productivos del país presentan algún nivel de afectación, dado que la inseguridad y los elevados costos de las pólizas de seguro impactan en los costos finales de mercancías y productos.

La Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario de México dio a conocer de forma reciente las cifras de la inseguridad en dicho sector durante 2018: más de 3 mil incidentes, lo que implica un incremento de más de 70 por ciento con relación a 2017.

En nuestro país hay 26 mil 655 kilómetros de vías férreas, pero el mayor número de robos e incidentes ferroviarios se concentra en los estados de Guanajuato, Tlaxcala, Jalisco, Puebla y Veracruz.

En la última actualización de las estadísticas oficiales se habla de 292 siniestros, mil 65 eventos de robo, y dos mil 576 actos vandálicos; datos actualizados al tercer trimestre de 2018.

Con 18 siniestros, Veracruz fue el sexto estado con más casos en ese rubro; le superan Nuevo León, Estado de México, Guanajuato, Michoacán y San Luis Potosí.

Pues bien, de los 18 siniestros ocurridos en territorio veracruzano, 11 tuvieron su explicación en causas ajenas al ferrocarril.

En el caso del robo al tren, si bien la entidad no se ubica entre las que más registran este problema, sí se mantiene con elevados números: 43 en el último trimestre evaluado; y algo parecido ocurre con las estadísticas del vandalismo: 61 casos en Veracruz, que no forma parte de las primeras diez entidades.

Uno de los casos más recientes ocurrió durante los primeros días de 2019 en los límites de Veracruz y Puebla, cerca de Acultzingo, donde sujetos armados intentaron obstruir el paso del tren para robar la mercancía que transportaba; en el hecho intervinieron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y del Instituto de la Policía Auxiliar, que impidieron el que se consumara el robo.

Antes de ello, también en la zona limítrofe de Puebla y Veracruz, sujetos armados asesinaron al maquinista y a un custodio con la finalidad de perpetrar un asalto al tren.

Así, desde hace años la inseguridad se ha convertido en un motivo de preocupación para las empresas que mueven sus productos y mercancías a través de la red nacional de vías férreas y no sólo para los grandes consorcios que dominan el negocio del transporte ferroviario.

El asunto de la inseguridad en el sistema ferroviario es uno de los problemas que enfrenta la entidad; no es tan escandaloso el robo al tren como los delitos de alto impacto, homicidio y secuestro por ejemplo, pero sí ocasiona un fuerte daño en los sectores productivos, por lo que la autoridad debe actuar para frenar a los grupos delincuenciales que operan en las zonas que son consideradas como focos rojos, como los límites entre Veracruz y Puebla.

Veracruz, guerra de rumores

En Veracruz  se observa una limpia al interior del gobierno estatal.  Hay más de mil aviadores despedidos; se han recuperado plazas de maestros; e iniciado investigaciones sobre irregularidades como las inversiones en las cámaras de vigilancia que nunca funcionaron, o como gastos con los que se benefició de manera indebida a personas allegadas al neopanismo o al grupo yunista.

Como consecuencia de ese trabajo, comenzó una campaña de rumores en redes sociales, que apuntaban a una supuesta salida anticipada de Cuitláhuac García del cargo de gobernador. Nada serio.

Por cierto, como rumor también ha circulado la especie de que quien sí tendría que preocuparse es el ex gobernador Miguel Ángel Yunes, dado que en el Altiplano se fortalece la versión que apunta a una reactivación de las investigaciones que existen en su contra. @luisromero85