Veracruz, Ver.- Las matracas sueñan y el ruido de las personas se oye al por mayor. Por todo el mercado Hidalgo se sabe ya que hubo otra “inocente palomita” que cayó en la broma del día.

La mayoría de las personas caminan con cautela e ignoran el instinto de recoger la cartera llena de billetes o las monedas que se encuentran en el suelo.

Muchos saben que no se trata sino de la broma de los Santos inocentes que realizan los locatarios y empleados y que aunque lo intenten esos objetos preciados no se quitarán del suelo, pues fueron pegados especialmente para el día.

Algunos de los empleados merodean con matraca en mano y mientras que no descuidan sus labores, algún ojo siempre está puesto en la broma que pusieron.

Sin embargo, la cantidad de personas que participan en colocarlas y las que caen ya no son las mismas que antes, según los participantes.

Alexis Andrés, uno de los empleados que participan, indicó que las personas que tienden las trampas ha disminuido debido a que los que normalmente participaban ya no está.

“Va bajando la tradición y eso pero los que ya somos viejos pues ya sabemos y ya seguimos (…) no todos entran porque muchos que eran viejos ya se van, otros ya fallecieron y están los nuevos que seguimos la tradición”, aseguró.

Dijo que en su mayoría las personas que caen en las trampas son turistas pues los locales saben perfectamente que es una de las bromas tradicionales.

“Foráneos, ya los que son de aquí de Veracruz ya se la saben, pero los que son de fuera no, turistas sobre todo”, aseguró.

Ana Alicia Osorio/Avc