La organización no gubernamental México ¿cómo vamos? difundió de forma reciente los indicadores estatales de la deuda pública y, en general, del comportamiento de las economías de las entidades de la República.

No hay buenas noticias para Veracruz; de hecho, no se esperaba que las hubiera dado el altísimo nivel que en la última década ha tenido la deuda pública del estado.

México ¿cómo vamos? es una organización que se define como un colectivo de investigadores integrado por un grupo plural de académicos y expertos en economía y política pública mexicana.

Este colectivo difunde trimestralmente los indicadores de la deuda pública de los estados; en su más reciente reporte ubica a Veracruz en rojo, debido a un nivel de endeudamiento superior al promedio nacional. De hecho, con relación al Producto Interno Bruto, la entidad gobernada por Miguel Ángel Yunes Linares fue la sexta con los peores números del país, superada sólo por Chihuahua, que va a la cabeza en esa lista negra, Quintana Roo, Chiapas, Coahuila y Nuevo León.

Por otro lado, a pesar de esa mala calificación, el colectivo México ¿cómo vamos? registra un avance significativo en la tendencia de la deuda pública veracruzana: en 2017, ésta representaba el 4.9 por ciento del Producto Interno Bruto; este año, primer trimestre de 2018, se ubicó en 4.5.

Lo lamentable es que en el semáforo estatal, que se refiere a todos los indicadores de la economía, Veracruz mantiene las luces rojas: el crecimiento económico de la entidad, por ejemplo, fue de -0.9 por ciento en el primer trimestre del año; la meta anual es crecer 4.5 por ciento, algo que ni en sueños alcanzaría el estado.

Otro indicador son los empleos formales generados y en ese rubro, Veracruz registró una pérdida de 8 mil 372 espacios laborales en el acumulado del segundo trimestre del año. Además, la productividad pasó de 126 a 123 pesos, en cifras comparadas entre el primer trimestre de 2017 y el mismo periodo de 2018.

Si bien la pobreza laboral se redujo, este avance está lejos de considerarse satisfactorio: al segundo trimestre del año, más de la mitad de la población veracruzana, 52.3 por ciento, se encontraba en esa condición; y algo parecido ocurre con la informalidad laboral que en un año pasó de 62.2 a 59 por ciento.

La desigualdad laboral pasó de 0.389 a 0.383 del segundo trimestre de 2017 al mismo periodo del presente año; en tanto que la ocupación del gobierno se ubicó en 3.6, cuando era de 3.9 por ciento.

En términos generales podríamos decir que la economía veracruzana se encuentra estancada: hay un decremento en la actividad económica de casi un punto porcentual; se han perdido empleos lejos de generarse; y la productividad también ha bajado. La pobreza laboral sigue alta, al igual que la informalidad.

Ese es, en síntesis, el comportamiento de la economía veracruzana cuando faltan tres meses para que concluya la administración estatal que encabeza Miguel Ángel Yunes.

Será el PRI una “oposición crítica”, afirma Anilú

En unos días, el primero de septiembre, entrarán en funciones los próximos diputados federales, entre los que se encuentra la ex delegada de la Sedesol en Veracruz, Anilú Ingram Vallines.

La próxima legisladora federal se refirió este lunes al papel que desempeñará el PRI en el siguiente Congreso; dijo que el tricolor será una oposición firme, crítica y responsable; no seremos, agregó, un partido que se oponga a todo por sistema, dado que “la sociedad no quiere más divisiones, sino un mayor desarrollo y mejor calidad de vida”.

Anilú Ingram inicia con fuerza su nuevo encargo, dado que será vicecoordinadora de la bancada de su partido. Hay quien le ubica como pieza importante en el esquema del coordinador del grupo priista en la Cámara Baja, René Juárez Cisneros; y del ex secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

Desde esa nueva posición, la también ex diputada local veracruzana trabajará, nos dicen, en la reconstrucción de su partido. @luisromero85