Así como han cerrado bares a causa de la violencia, de la misma manera han aperturado otros giros negros, con shows de desnudos para el gusto heterosexual y homosexual, a los que la gente asiste para ingerir bebidas alcohólicas en vez de bailar.

Tres maestros y músicos de salsa invitaron a los ciudadanos a salir a bailar, divertirse, evitar los excesos y cuidarse, porque del comercio de los bares dependen los ingresos de cientos de familias en Xalapa.

En estos negocios laboran meseros, meseras, barman, garroteros, cocineras, cajeras, valet parking y de seguridad que cada fin de semana salen a laborar desde las cinco de la tarde y regresan a sus hogares en las primeras horas del otro día, porque desarrollan un trabajo durante toda la noche.

Los maestros y músicos lamentaron que tras los atentados ocurridos en el bar Madame, el 22 de mayo del 2016, y La Ópera, el día 27 de enero del 2018, la gente dejó de salir por temor a ser víctimas de la violencia, sin embargo, después de un mes regresaron a la vida nocturna.

“Después de que pasó lo de Madame y la Opera yo tomé la decisión de no salir a bailar, ni a hacer vida nocturna, y así como yo más gente lo hizo. Pero pasó el tiempo y la gente siguió saliendo y eso es bueno porque de ahí se genera dinero para las familias de la gente que ahí trabaja”, indicó el director de la Compañía Pasión y Son, Aarón Briones Linares

Por su parte el director artístico de la Academia Ponte N’Klabe, Cesar Hernández expresó que en Xalapa, se han inaugurado más centros nocturnos que en vez de invitar a bailar, incitan a ingerir bebidas alcohólicas, por el tipo de “ambiente” que ahí se genera con shows para el gusto de hombres, mujeres, gays y lesbianas.

Dijo que tras el atentado en el Bar Madame, en Xalapa «se siguen abriendo lugares de ese tipo, en las redes sociales se ve, gay, striptsese, gay, show men. Ahí la gente va más a tomar que a bailar”.

Los tres maestros coincidieron en señalar que en Xalapa solo hay dos lugares donde la gente asiste a bailar salsa, y los demás son para ir a consumir bebidas alcohólicas.

“El ambiente de la salsa es más tranquilo, no falta que te topes a dos o tres borrachos, pero es más tranquilo” dijo.

Verónica Huerta/Avc