A Margarita Zavala le está ganando la mala vibra y muy probablemente hoy diga adiós al PAN, el partido de sus amores en el que ha militado durante 34 años.

Y se va porque ya no aguanta al líder nacional, Ricardo Anaya, que se ha convertido en dueño del blanquiazul.

Pero si renuncia, cometerá el error político más grave de su vida porque le estaría abriendo la puerta de la candidatura a la presidencia de la República, a un sujeto sin carisma y sin atributos políticos como lo es Ricardo.

Margarita es superior en todo al chamaco imberbe; no sólo en las encuestas. Ha sido una excelente militante, una mujer de principios, una de las mejores diputadas que ha tenido el PAN en el Congreso de la Unión y fue una Primera Dama de excelencia.

De lo único que la pueden señalar es de haberse casado con Felipe Calderón, pero bueno… cada quién sus gustos.

En contrapunto con Ricardo al que han acusado de traidor, fullero, corrupto y de enriquecerse de manera inexplicable; a Margarita nadie le ha dicho ladrona o corrupta. Entre otras cosas porque no lo es. Su expediente político es impecable.

Todo esto la ubica como puntera en las encuestas para que sea la candidata del PAN a la presidencia de la República, muy por encima de Ricardo que se ha ido hasta el tercer lugar en las preferencias por los candidatos de ese partido. (Última encuesta de SDP Noticias dada a conocer el 1 de octubre del 2017: Margarita Zavala 42.9%; Rafael Moreno Valle 32.6% y Ricardo Anaya 24.5%).

El problema es que Ricardo se ha adueñado del pandero panista y no lo va a soltar.

Por eso se va Margarita y por eso perderán todos en el PAN.

Es muy probable que la ex primera dama se cobije en las siglas de un partido pequeño que no tendrá la infraestructura económica del PAN. Y si se postula como candidata independiente las cosas se le pueden poner peor.

Quizá alguien me diga: “Oye, Jaime Rodríguez ‘El Bronco’ ganó la gubernatura de Nuevo León como candidato independiente” Y en efecto. Pero el Bronco tuvo todo el apoyo económico de los industriales regiomontanos que son dueños de medio México. ¿Cuántos empresarios apoyarían a Margarita en su aventura por la presidencia?

Por su parte Ricardo Anaya se frota las manos porque es, prácticamente desde ahora, candidato del PAN con el apoyo de esa jalada llamada Frente Ciudadano. Pero si cree que será el sucesor de Enrique Peña en Los Pinos está muy equivocado.

Un sujeto que no tiene presencia ni carisma entre el electorado, que jamás se ha dado un baño de pueblo con los pobres ni los clasemedieros, porque los pirrurris no se juntan con la raza y él es un pirrurris, no tiene la mínima posibilidad de ganar la presidencia.

A mediados del 2016 la ecuación para el PAN era muy sencilla: designar como candidata a Margarita porque es la única en ese partido con la suficiente fuerza y reales posibilidades de hacer ganar al blanquiazul.

Con ella fuera del PAN, sus posibilidades de ser la primera presidenta de la República se diluyen, y con Ricardo Anaya como candidato, las posibilidades del PAN de llegar nuevamente a Los Pinos, se nulifican.

Conclusión: Ricardo Anaya no ganará y llevará a su partido al tercer lugar de la contienda. La lucha por la presidencia será entre el PRI y Morena. Y no entre Morena y el PAN si Margarita hubiera sido la candidata.

bernardogup@nullhotmail.com