En los días de la campaña presidencial, el gobernador de Veracruz sacó a relucir parte de su enorme repertorio de insultos, ofensas y calumnias para enderezarlas contra el candidato de Morena, Andrés Manuel López Obrador. Corrupto, vividor, loco fueron, entre otros, los calificativos que le profirió mediante videograbaciones que subió a las redes sociales, de donde los veracruzanos las han bajado para hacer una recopilación. ¿Con quién quería quedar bien Yunes Linares con esta actitud de carretonero? En su momento se dijo que con el presidente Enrique Peña Nieto, a quien le habría ofrecido “bajar” en las preferencias electorales a López Obrador a cambio de dejar a su hijo que ganara la gubernatura; si fue cierto falló. Otros pensaron que sacrificar la investidura, que arrastró Yunes Linares como trapeador, era para quedar bien con el candidato de la coalición PAN-PRD-MC, Ricardo Anaya Cortés, pero tampoco fue efectivo. Eso sí, Yunes Linares logró con sus ataques levantar más la simpatía por López Obrador, por el candidato a gobernador Cuitláhuac García Jiménez y por todos los abanderados de ese partido. El asunto es que Yunes Linares sumó a AMLO y a todos los candidatos que contendieron por los cargos de elección popular en Veracruz, en su contra, y ahora que los ciudadanos le dieron a los morenistas su apoyo abrumador en las urnas, el gobernador Yunes Linares ha tenido que adoptar una conducta contraria para tratar de buscar el “perdón” de López Obrador, presidente electo de México, acudiendo a una salutación de gobernadores en la ciudad de México. En esa reunión, Yunes aparece en las fotos con una sonrisa fingida, pero nerviosa, y López Obrador serio, y en la foto de grupo, al veracruzano lo mandaron hasta lo último, en una orilla, casi fuera de la imagen. Eso sí, salió diciendo que platicó con el presidente electo sobre asuntos de Veracruz y que en estos días se reúne con él en la ciudad de México: de la soberbia a la abyección.