Producción de cereal en el orbe-FAO

La producción mundial de cereales en 2016 de acuerdo a estimaciones de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura),confirma las perspectivas de una cosecha récord que se ha incrementado al alza nuevamente,hasta 2,592 millones de toneladas.

Menciona el organismo que la revisión en este mes (febrero 2017),refleja principalmente las cosechas de trigo superiores a lo previsto en países como Australia y la Federación de Rusia.

La zona de producción de trigo de invierno en Canadá, ha sufrido una merma,debido a las perspectivas de reducciones en los precios.

En Europa,las condiciones atmosféricas favorables,permiten el estable crecimiento de la cosecha de trigo de invierno en la Unión Europea (UE).

Se prevé que la zona de producción total en la UE no variará respecto del año pasado. Las perspectivas de producción continúan siendo favorables en la Federación de Rusia, por el aumento de la extensión de la zona de producción de trigo de invierno.

En Asia, se pronostica un incremento de las plantaciones de trigo. En la India,se sostendrá un favorable aumento en la producción de 2017.

En el hemisferio sur, las condiciones atmosféricas benéficas darán lugar a un repunte en la producción de cereales en los países de África Austral en 2017. Se prevé una recuperación de más de un tercio en las plantaciones.

La previsión de la FAO sobre la utilización mundial de cereales en 2016/17, ha aumentado en casi tres millones de toneladas respecto de diciembre (2016),hasta alcanzar los 2,567 millones de toneladas, un 2% (50,4 millones de toneladas) más que en 2015/16.

Esta ascendencia en la producción, espera un marcado aumento con respecto a los valores 2015/16, de hasta 500 millones de toneladas. Debido principalmente al creciente uso alimentario.

Estudios realizados por la Doctora Giulia Enders (microbióloga), en el Instituto de Microbiología e Higiene Hospitalaria en Fráncfort Alemania, demuestran que como las plantas quieren reproducirse para preservarse,y el ser humano y otras especies se comen a sus descendientes,entonces las plantas, producen sustancias que envenenan en pequeñas cantidades sus semillas, para producir reacciones adversas a quien las consume. Esto como medio de defensa para su sobrevivencia, en tanto el hombre no guarda el equilibrio entre planta-hombre,hombre-planta.

Cuanto más peligro intuye una planta, más cantidad de estas sustancias tóxicas vierten en su simiente.

El trigo se preocupa,porque su germen tiene un período de tiempo muy breve para crecer y multiplicarse, entonces se defiende de la depredación.

Estas sustancias tóxicas determinan las reacciones alérgicas que disparan la alerta del sistema inmunológico para proteger al organismo humano de esos alérgenos, y el sistema inmunológico produce anticuerpos denominados; inmunoglobulina E (Ige). Estos anticuerpos se encuentran principalmente en el aparato respiratorio y las membranas mucosas. En la respuesta inmunológica del organismo,unas células llamadas ,mastocitos, liberan sustancias químicas, entre ellas histamina. Estas sustancias químicas son las que desencadenan muchos de los síntomas alérgicos.

La celiaquía o enfermedad celíaca, es una enfermedad crónica,multiorgánica autoinmune (el sistema inmunitario ataca las células sanas del cuerpo por error), que daña primeramente al intestino en sus vellosidades,debilitando también el sistema nervioso. Los afectados padecen dolores de estómago, diarreas, somnolencia, desgano, sensación de debilidad,los niños no tienen un crecimiento adecuado y están pálidos en invierno. Esta intolerancia permanente al gluten, tiene una predisposición genética a proteínas presentes en el trigo,avena,cebada, centeno, entre otros.

Una teoría sobre el origen de las alergias apunta hacia la digestión en el intestino delgado. Cuando este no consigue descomponer una proteína en sus diferentes aminoácidos. Estas partículas pequeñas envueltas en una delgada capa de grasa,llegan a la linfa, y allí son captadas por las células inmunitarias, registrando la presencia de esa partícula y, cuando las vuelven a detectar, pueden reaccionar con más intensidad. En algún momento basta que las partículas se pongan en contacto con la boca para que las células inmunitarias bien informadas se activen. La consecuencia de esta activación inmunitaria son las reacciones alérgicas.

El desarrollo de alergias a través del intestino delgado puede ser causado por el gluten, una mezcla de proteínas de los cereales como el trigo.

Una de cada cien personas presentan intolerancia al gluten, teniendo como diagnóstico la enfermedad celiaquía, aunque son en  mayor porcentaje las que presentan alguna sensibilidad al gluten.

La mejor terapia para la celiaquía y la sensibilidad al gluten es NO ingerir alimentos con trigo o derivados.

Las personas no perciben que se sienten mejor, hasta que llevan una o dos semanas sin comer gluten; de repente tienen menos problemas digestivos,menos dolores de cabeza o articulares, se pueden concentrar mejor, sienten menor cansancio, ya no se sienten abatidas. Aunque las pruebas de celiaquía den negativo, con la sintomalogía es suficiente para suspender el consumo de gluten.