Desde 1856 existe un problema en la disciplina matemática que consiste en verificar que las raíces de la función zeta de Riemann se encuentran en una línea vertical del plano complejo, por ello el Instituto Clay de Matemáticas, de Cambridge, Massachusetts, ha ofrecido un millón de dólares a la primera persona que desarrolle una demostración correcta de la conjetura.

Lo anterior es sólo una muestra de que “hay muchos problemas abiertos en matemáticas y muchos de ellos son muy antiguos”, destacó Josué Ramírez Ortega, profesor-investigador de la Facultad de Matemáticas de la Universidad Veracruzana (UV).

Mencionó que la Biblioteca de Matemáticas del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional es la más grande de Latinoamérica en su tipo; también es una clara muestra de que el conocimiento es vasto en esta ciencia, sin embargo por muy amplio que sea, no alcanza para resolver problemas sencillos, de la vida cotidiana, o en ciertos campos como el de la ingeniería.

“El mundo de las matemáticas es muy grande, hay mucho que hacer, porque las áreas de las matemáticas son diversas y a su vez cada una de éstas se va bifurcando en áreas especializadas, creo que es algo así como la medicina.”

Josué Ramírez impartió la conferencia “Análisis complejo y teoría de números”, el viernes 28 de septiembre en la Sala de Usos Múltiples de la Facultad de Instrumentación Electrónica, como parte del último día de actividades del Cuarto Taller de Teoría de Números Centro-Sureste. El objetivo de la charla fue mostrar una relación entre la teoría de números primos y la de variable compleja, y más concretamente de la función zeta de Riemann.

En su opinión, el desarrollo de actividades como el Cuarto Taller de Teoría de Números Centro-Sureste representa un realce a la UV y una proyección de los académicos participantes, toda vez que permite estar informado de los problemas de frontera, ampliar la cultura en cuanto a investigación y docencia, así como coadyuvar en la elaboración de proyectos de investigación entre distintas instituciones educativas. Por otro lado, generalmente la investigación que desarrollan los académicos resulta inaccesible para los estudiantes, por ello al momento de presentarse en encuentros como éste, se hace el esfuerzo por motivarlos e involucrarlos.

Al cuestionarlo sobre la función zeta de Riemann y que para quienes no están inmersos en el mundo de las matemáticas parecería que no tiene aplicación a la vida real, explicó: “Creo que falta cultura. Se piensa que las matemáticas sólo son números y cuentas, pero tiene muchísimas aplicaciones en la administración, la física, incluso en la medicina”.

Para ilustrar la incursión de esta ciencia en otras citó: “Si una persona va a un laboratorio de resonancia magnética, ahí hay matemáticas. Los aparatos se desarrollan con teorías amplias, donde se ven involucradas muchas profesiones (participan físicos, químicos, ingenieros). El diseño y la creación de un aparato implican mucho conocimiento interdisciplinario”.

Karina de la Paz Reyes/Prensa UV