Ante la creciente frecuencia de sequías que han afectado a diversas regiones de Veracruz y del país, el tema del abasto de agua es parte de la agenda pública. Datos del Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) revelan, por ejemplo, que un altísimo porcentaje del territorio veracruzano presentó este año condiciones de sequía moderada a severa.

Esta situación impacta directamente en la disponibilidad de agua para el consumo humano, la agricultura y la industria, agravando los problemas socioeconómicos de comunidades que dependen de estos recursos. A pesar de las lluvias estacionales, la falta de infraestructura adecuada para el almacenamiento y distribución del agua limita la capacidad de respuesta ante estas crisis.

En ese contexto llama la atención que empresas que operan en Veracruz innovan en sus operaciones a fin de ser escrupulosas en el tema del cuidado al medio ambiente.

Un ejemplo de éstas es Granjas Carroll de México (GCM), que se ha posicionado como un referente en la industria porcina nacional, no solo por la calidad de sus productos, sino también por sus acciones en pro de la sostenibilidad y la optimización de recursos.

La citada empresa, que genera más de 2,700 empleos directos en los estados de Puebla y Veracruz, ha implementado un avanzado sistema de tratamiento de agua en su planta procesadora de carne, lo que le permite procesar 6,917 metros cúbicos de agua semanalmente.

Este recurso, una vez tratado, es reutilizado en diversas tareas internas, como la limpieza de unidades y los servicios sanitarios para los trabajadores.

La reutilización del agua en estas actividades no solo es reflejo de la responsabilidad de la empresa con el medio ambiente, sino que también contribuye a la eficiencia operativa.

GCM ha logrado reducir en casi un 40% el uso de agua en algunos de sus procesos, lo que demuestra que la eficiencia y el respeto por el medio ambiente pueden ir de la mano con la productividad empresarial.

Una de las estrategias más innovadoras de la empresa es la captación de agua de lluvia. Este recurso natural es utilizado para la limpieza en sus instalaciones, lo que reduce significativamente la dependencia de fuentes de agua convencionales. En sus granjas, la calibración de bebederos para cerdos y el uso de espreas automatizadas en la planta procesadora de carne aseguran un suministro exacto de agua, minimizando el desperdicio.

Otra medida clave es el raspado con espátulas de los pisos en las granjas, lo que facilita la limpieza al reducir el volumen de agua empleado. Estas prácticas han permitido que GCM logre una reducción del 25% en el consumo de agua en sus granjas y del 39% en su planta procesadora, cumpliendo con la normativa NOM-001-2021-SEMARNAT.

Este tratamiento de agua no solo garantiza un proceso eficiente, sino que además permite que se críen peces en las instalaciones, debido al alto contenido de oxígeno en el agua tratada.

Ojalá y sean más las empresas con presencia en Veracruz que logren la integración de tecnologías sostenibles que puedan generar importantes beneficios, tanto para la empresa como para el entorno ambiental.

En un mundo donde los recursos hídricos son cada vez más limitados, GCM está sentando las bases para un modelo de gestión eficiente y responsable, evidenciando que es posible crecer de manera sostenible y además estar a la vanguardia en la preservación de los recursos naturales.

@luisromero85