Tras su triunfo electoral y toma de posesión, un presidente municipal corrió presuroso a revisar la caja fuerte de la tesorería municipal. Para su sorpresa, sólo encontró un billete de mil pesos. Frustrado, llamó a su antecesor y mentor político, quien lo había impuesto en el puesto. “Compadre, ya ni la chingas, me dejaste mil pesos en caja”, reclamó. “Te juro que no los vi”, fue la respuesta al otro lado del teléfono. Lo mismo le pasará a Claudia Sheinbaum.

México gasta más de lo que gana y compensa el faltante con deuda pública.

Para cuando don Andrés se vaya a “La Chingada” en octubre, la deuda total del gobierno federal finalizará en alrededor de 17 billones de pesos (bdp), esto es 50% del Producto Interno Bruto de México (PIB); en el 2018, la deuda era de 10 bdp y representaba 45% del PIB.

¡¡Nunca un gobierno se había endeudado tanto!! El problema es que no hay varo para pagar ni para sostener muchos de los programas sociales que tantos votos dieron a Morena. Y doña Claudia lo sabe, pero no lo dirá…

El Presidente, su gobierno y Morena hicieron muy mal las cuentas. Pero eso no importa, para eso están en la plenitud del pinche poder. El desequilibrio fiscal provocado por la mala planeación, hará que millones de mexicanos dejen de recibir algunos de estos programas.

Veamos. Analistas financieros estiman que el presupuesto de la Federación requiere de casi 100 mil millones de pesos adicionales cada año para cubrir los incrementos tan sólo en la Pensión para Adultos Mayores, lo mismo por sus montos que por una población que envejece.

Lo explico con números reales. En 2018, había 410 mil personas beneficiadas, del estrato más pobre de la población; y 240 mil personas del estrato con mayores ingresos. Apenas el año pasado aumentó a 530 mil personas ubicadas en el estrato más pobre, y a un millón 380 mil personas del estrato con mayor ingreso.

Hoy los ricos reciben más dinero que los pobres, por una razón muy sencilla: la expectativa de vida de los más ricos es muchísimo mayor que la de los más pobres.

Además, la presidenta Sheinbaum encontrará a un país hipotecado: Pemex, la CFE y las obras del AIFA, la refinería de Dos Bocas y el Tren Maya, siguen siendo un barril sin fondo.

La deuda de corto plazo de Pemex pasó de 8 mil 413 millones en 2018, a 30 mil 253 millones de dólares para este año. Pemex no podrá pagar porque en cuatro años ha requerido que el gobierno le asigne más de 800 mil millones de pesos en aportaciones y exenciones. Además, las pérdidas acumuladas en refinación son de 630 mil millones de pesos tan sólo en los últimos tres años.

La CFE, una empresa que hasta 2018 generaba utilidades, tuvo que recibir más de 300 mil millones de pesos del gobierno en los últimos tres años.

Y falta dar de comer a los elefantes blancos. La refinería de Dos Bocas terminará costando más del doble -cerca de 18 mil millones de dólares-, el Tren Maya -20 mil millones de dólares- y de la cancelación del aeropuerto en Texcoco faltan por pagar más de 4 mil millones de dólares.

Ana Miriam impugna porque le

podrían revocar la constancia de mayoría…

La inexplicable decisión de la presunta ganadora de la elección a diputado federal por Xalapa tendría un propósito: dar un paso adelante en caso de que el Tribunal Electoral decida revocarle la constancia de mayoría.

Eso de impugnar la elección que ganaste parece absurdo. No hay antecedente de semejante aberración. Pero no lo es…

Ignorante del derecho electoral y de prácticamente de todo lo que sale de su boca, la infumable diputada local –recordada por disparates de que el presidente López Obrador le “daba asquito” o la propuesta de implantar toque de queda a las mujeres en Xalapa para evitar que las violenten-, decidió hacer caso a sus asesores y combatir el resultado electoral, asegurando que ganó por más de 4 mil votos y no el puñado que arrojó el cómputo.

Ana Miriam no entiende de procesos electorales; lo que sí sabe es que podría perder la elección en la mesa. Así, con la impugnación, pretende iniciar su propio proceso antes de recibir la infausta noticia.

Américo construye su candidatura a la alcaldía…

La defensa jurídica que está haciendo Américo Zúñiga de su triunfo tiene un doble propósito: intentar revertir en la mesa la constancia de mayoría a favor de Ana Miriam Ferráez y construir, al mismo tiempo, la candidatura a la presidencia municipal de Xalapa que se tendrá que decidir en los próximos meses.

El viernes pasado se reunió con más de mil simpatizantes en el salón El Caracol. En su defensa, dijo que la defensa jurídica “no lo estamos haciendo por ambición o por capricho, sino porque es lo justo, porque somos soldados, no derrotados de una causa invencible y la causa que tenemos es la justicia y la verdad, el respeto al voto de la democracia”.

Y dio la clave de lo que será su próxima candidatura. “A partir de ahora anunciamos que no nos vamos a rendir; vamos a hacer que todos los ciudadanos que con partido o sin partido optaron por esta opción, se sientan bien representados. Esto no acaba, apenas empieza y aquí habrá equipo Xalapa para rato”.

Hay quien asegura que una de las razones del resultado electoral fue que Morena empezó a trabajar años antes del año electoral, como la pre candidatura de Claudia Sheinbaum y las corcholatas, mientras que la oposición lo hizo de manera improvisada y sin una propuesta específica. Américo quiere empezar desde ahora.

Con el pretexto de la impugnación, algo que se tendrá que resolver a más tardar en el mes de agosto, antes de que tomen posesión el 1 de septiembre en San Lázaro, el ex alcalde xalapeño iniciará una arriesgada apuesta por la Presidencia municipal, en la que podría enfrentarse al empresario diputado local electo, Antonio Ballesteros, hombre cercanísimo al próximo Secretario de Gobierno, Ricardo Ahued.

En realidad, en la oposición no hay otro perfil para competir.

Y Dorheny GARCIA Cayetano nadie la va a extrañar

A nadie le importa si Dorheny GARCIA se va o se queda en Veracruz. En realidad, nadie va a extrañar su arrogancia y caprichosa actitud solapada por el gobernador del estado. Su anuncio de que irá a un cargo del gobierno federal, no confirmado por nadie más que por ella misma, será un merecido exilio.

Como aquí se mencionó, a Cuitláhuac le espera el trapeador de oro en la Sener como titular de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de Energías. En caso de que ese sea el lugar al que pretende ir Dorheny, entonces ya puede aspirar a cambiar el agua de la cubeta.

En realidad, en Veracruz jamás hubo un “Cuitlahuismo”, y si lo hubo, este se redujo sus familiares y amigos más cercanos. Jamás construyeron una verdadera clase política que pudiera subsistir más allá de un sexenio.

Y los casos más evidentes son Dorheny GARCIA Cayetano y Eleazar Guerrero, ambos expulsados del paraíso morenista de la próxima administración y quienes buscan con desesperación acomodo en el gobierno federal.

La necesidad de embolsarse hasta el último peso hizo que el gobernador cumpliera a Dorheny GARCIA el capricho de regresar a la Secretaría del Trabajo. A pesar de tener asegurada una curul en el próximo Congreso local, busca emigrar a la Cdmx porque aquí no sería ni la sombra de lo que fue en este sexenio, donde llegó a ocupar, al mismo tiempo, un cargo en el gabinete y en la dirigencia estatal de Morena, algo que fue criticado incluso por el senador electo Manuel Huerta.

Los días de capricho y bonanza se acabaron para Dorheny, Eleazar y todos los parientes del gobernados y sus más cercanos. El anuncio de que la Secretaria del Trabajo se irá al gobierno federal no le importó a nadie; sonó más bien a un acto de despecho, a una justificación no pedida del exilio que le espera.

La ratonera

Cuiláhuac García dice que Veracruz ya logró cumplir, de manera anticipada, con todos los Objetivos para el Desarrollo Sustentable (ODS) de la Agenda 2030. No lo ha logrado ningún país del mundo. Lo dice el mandatario que ni siquiera sabe qué significa la ONU. ¡Pa’verguezas!