Prefacio.

A pesar de que conozco su calidad profesional y la rectitud de su comportamiento, no me parece que la abogada Angélica Sánchez Hernández fuera una buena opción para competir por un cargo de elección popular, mucho menos el Senado de la República, que exige a los aspirantes a buscar el voto en toda la entidad. *** Hasta antes del ataque del que fue víctima por parte del aparato de justicia del Estado, Angélica Sánchez era muy poco conocida, y fuimos muchos los que levantamos la voz para denunciar los abusos que se pretendían cometer en su contra. *** Un amplio rechazo de la opinión pública y el respaldo de prestigiados abogados y relevantes actores políticos, permitieron que Angélica Sánchez librara la cárcel, y fue en ese momento en el que Dante Delgado, el dueño de Movimiento Ciudadano (MC) decidió que había que capitalizar esa exposición mediática. *** Está bien. Cada quien sus estrategias en materia electoral. Pero lo que hubiera pasado como una “anecdótica participación”, se ha convertido, por mérito del gobernador Cuitláhuac García, en una cruzada popular contra la terquedad y el abuso de poder. *** Apenas se supo que Angélica Sánchez sería registrada por MC en la contienda por el senado, de inmediato echaron a andar la maquinaria de la represión judicial en su contra. *** Este lunes fue vinculada a proceso por los delitos de tráfico de influencia y contra la fe pública. La acusa la Fiscalía de Veracruz de “favorecer a Itiel Palacios para que recuperara su libertad. El juez de control en Pacho Viejo (que atiende consignas del gobierno estatal) dispuso que habrá tres meses para investigación complementaria y confirmó como medida cautelar que la abogada asista a firmar una vez al mes, que deposite una garantía de 200 mil pesos y que se le restrinja la salida del país. *** Angélica Sánchez recordó que ella presentó denuncia por desaparición forzada y tortura, hechos que fueron acreditados, incluso, por Margaret Satterthwaite, relatora especial de la ONU. *** El tormento legal continúa y Angélica Sánchez deberá hacer frente a un sistema judicial que obedece a las instrucciones de Palacio de Gobierno. Pero habrá de superar todos esos obstáculos y, en una de esas, gracias a la promoción que le están haciendo las más altas autoridades de Veracruz, estaría dando la sorpresa el 2 de junio.

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Se hace como el tío Lolo. Cuitláhuac García sugiere que, por responder a la pregunta de un reportero (pregunta que, por supuesto, fue “sembrada”) ya está habilitado para dar su opinión sobre el proceso electoral que se lleva a cabo en la entidad.

Sus propios abogados, con todo lo torpes que han demostrado ser, le deben haber explicado que no pueden llegar ante los órganos electorales a argumentar: “es que me preguntaron y, ni modo, tuve que responder”.

No es la primera vez que lo hace, y ya el órgano electoral le llamó la atención, a grado de que lo obligó a retirar de sus cuentas de redes sociales las expresiones que violentaron el principio de equidad de la contienda.

Dice no estar preocupado por las denuncias que presentó Pepe Yunes contra “quien resulte responsable” por el descarado desvío de recursos públicos para favorecer a las candidatas de Morena. Debería estarlo.

Cuando salía de la Fiscalía, al ser abordado por los reporteros, Pepe Yunes explicó que era importante que las denuncias se presentaran de manera puntual ante la Fiscalía. Que quizá en estos momentos la pudieran mandar al archivo, pero en unos cuantos meses las circunstancias serán otras y todo será cuestión de desempolvarlas y darles curso. Los que hoy gozan de impunidad, mañana podrían estar visitando esas cárceles que tanto han descuidado.

Cuitláhuac García ofreció este lunes una conferencia de prensa y fue reiterativo con el mensaje – ¿amenaza? – enviado a la alcaldesa de Acayucan, Rosalba Rodríguez para que, en caso de que no se sienta capaz de “mantener el control de su municipio”, pues entonces “que renuncie”.

Pero justo cuando insistía en enlodar el nombre de la autoridad municipal de Acayucan, llegó la noticia de que allá en el sur, justo en la zona que Rosalba Rodríguez mencionó como “dominada por las bandas criminales”, fue asesinado a balazos Andrés Valencia Ríos, expresidente municipal de San Juan Evangelista.

Minutos después del mediodía, dos sujetos a bordo de una motocicleta bajaron hasta un sembradío en el que Valencia Ríos apoyaba las tareas de Protección Civil para rescatar un cadáver que apareció en la comunidad de La Lima, y al estar ante él le dispararon en varias ocasiones.

Un día antes Cuitláhuac García aseguraba que la zona sur estaba en calma, que no tenía noticias de esa injerencia de la delincuencia organizada de la que hablaba la alcaldesa de Acayucan. Una vez más la “maldita realidad” le respondió con una bofetada.

Está claro que lo que hoy ocupa la atención del gobernador de Veracruz no es la delincuencia, sino el proceso electoral, algo raro si -como él mismo dice- “la oposición está derrotada” y si -como dicen sus corifeos- “Rocío Nahle le lleva más de 30 puntos de ventaja a Pepe Yunes”.

Quizá no sea la elección estatal la que le preocupe, sino las dificultades que está encontrando para acomodar a “su gente” en cargos de elección popular. No crea que su intención es blindarlos frente a futuros litigios penales. En realidad, los quiere en los Congresos estatal y federal “para que ayuden a Rocío”.

Ese es el mundo de fantasía que nos pretenden vender desde Palacio de Gobierno. Un mundo en el que no hay violencia, en el que no hay impunidad, en el que el gobernador “garantiza” la imparcialidad de las elecciones y sólo toca ese tema “cuando le preguntan”.

De verdad que da pena.

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Epílogo.

Son cada vez más graves los problemas con los puntos de inspección y movilización en materia de Sanidad Animal, pues opera sin autorización, en virtud de que Senasica (Servicio Nacional de Sanidad Inocuidad y Calidad Agroalimentaria) les negó el aval a 12 puntos de inspección llamados “itinerantes” y que se habrían habilitado para realizar inspección ganadera en diversos puntos del estado de Veracruz. *** La falta de aplicación de los recursos destinados a la sanidad animal y los pésimos resultados obtenidos en la certificación del departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) ha dejado a Veracruz en problemas con sus rutas de inspección por inoperantes. *** Los puntos de inspección carecen de los elementos básicos para operar, lo que ha sido observado por la Secretaría de Agricultura (Sader) y por ello decidieron no renovarles las autorizaciones, ya que no son aptos para aplicar la normatividad federal en la materia. *** Entre las observaciones que les hicieron, fue que los inspectores no están capacitados, además de que se desconoce la ubicación y la ruta de los puntos de inspección; detectaron, además, alteraciones en las bitácoras de reporte diario. *** Ahora, para justificar su trabajo, las autoridades estatales están implementando retenes, los cuales son inconstitucionales y causan actos de molestia a los productores ganaderos. *** de todo eso nada ha dicho el subsecretario de Ganadería, Humberto Amador Zaragoza, más ocupado en temas electorales que en la producción ganadera de Veracruz.

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