Un escenario difícil enfrenta la economía mexicana, pues no sólo padece la caída de inversión y del poder adquisitivo sino que las tensiones políticas entre nuestro país y sus aliados comerciales, Estados Unidos y Canadá, podrían provocar que para 2023 el crecimiento económico llegue a sus niveles más bajos, estimó el economista Rafael Vela Martínez.

El Investigador del Instituto de Investigaciones de Estudios Superiores, Económicos y Sociales (IIESES) recordó que Veracruz se encuentra dentro de los últimos lugares de la recuperación de las entidades federativas en cuestiones económicas, por lo que este adverso panorama sugiere la urgencia de definir “una estrategia económica, sobre todo en cuestión agropecuaria para asegurar la alimentación de los veracruzanos”.

Empresarios no tienen compromiso con los mexicanos

Vela Martínez compartió que según estimaciones del Inegi, la inversión nacional cayó 1.2 por ciento en mayo, a comparación del mismo periodo del año anterior, siendo la construcción y compra de la maquinaria los rubros que se fueron más a la baja, uno de los grandes detonantes de generación de empleo en nuestro país.

Lo más grave, expresa, es que los empresarios parecieran indolentes ante la falta de oportunidades de sus connacionales:

“Aquí hay que señalar con mucha claridad que los empresarios de nuestro país no se advierte tengan un compromiso real con los propios mexicanos en términos de promover inversión para promover el empleo, eso hay que decirlo muy claro, a pesar de recibir por varios años beneficios extraordinarios, claro no hablo de todos los empresarios, sino empresarios grandes a nivel nacional”.

Recesión y desaceleración económica de Estados Unidos impactará en México

Respecto a la inversión, el economista destacó que el clima de inversión de por sí afectado por el discurso federal en contra de los empresarios, entró en una nueva etapa de tensión:

“En días anteriores desde la Casa Blanca anunciaron que llevarían a México a consultas para revertir el cierre del sector energético bajo las protecciones del tratado de Libre Comercio, eso significa una situación de incertidumbre porque es muy probable que tanto Canadá como Estados Unidos incrementen aranceles a las exportaciones, es decir los productos que le vendemos a ellos, en una actitud disuasoria hacia el gobierno mexicano por mantener esa actitud de contra de las inversiones extranjeras en el rubro de las actividades petroleras”.

Estas tensiones políticas, sumadas a la recesión técnica aceptada por el gobierno norteamericano, podrían ser la causa del poco crecimiento económico pronosticado para los próximos años, pues la Secretaría de Hacienda estimó que este año se crecería en ese aspecto 2.2. por ciento, cuando se había creído que podría ser un 4.4 por ciento a inicios del año.

Esto podría volverse aún peor en 2023, pues especialistas estiman el crecimiento en 0 “en virtud de la desaceleración de los Estados Unidos, en parte por la recesión técnica ya aceptada por el mismo gobierno y porque mantiene sus tasas de interés más altas lo cual alienta su inflación y esto va a impactar necesariamente en México, en un retroceso en el crecimiento económico”.

Por tal motivo, Vela Martínez concluye que es indispensable definir una estrategia económica a nivel nacional y por supuesto en cada estado para hacer frente a este escenario tan adverso que es la economía mexicana.

AVC

Conéctate con Formato7:

APUNTES | Pobre Veracruz