En algunos portales de noticias por internet se difundieron este domingo los resultados de una supuesta encuesta que habría levantado Morena, en el marco de la sucesión veracruzana.
Con el título “Rocío Nahle, puntera inalcanzable en la encuesta de Morena”, dicho texto apunta que la titular de la Secretaría de Energía tiene el 34 por ciento, con lo que “dobletea al aspirante más cercano, el alcalde xalapeño Ricardo Ahued, que registró 16 por ciento”.
De igual manera, muy rezagados ubica la supuesta encuesta tanto al diputado Gómez Cazarín, presidente de la JUCOPO en el Congreso local (8.6 por ciento), como al secretario de Educación, Zenyazen Escobar (8.3)
Todavía más abajo, Manuel Huerta, Eric Cisneros y Sergio Gutiérrez Luna, delegado federal en la entidad, secretario de Gobierno y presidente de la Cámara de Diputados, respectivamente.
Habría que decir que esa encuesta no presenta metodología, ni fecha de realización, ni el aval de una casa encuestadora; lo único que consigna son las supuestas preferencias, que podrían resultar poco creíbles.
No establece tampoco si los cuestionarios –en el caso de que existan– se aplicaron a la población abierta; a los militantes del partido; o sólo a quienes se encontraban en ese momento en alguna oficina gubernamental.
Lo cierto es que al no exhibir fuente, ni metodología, ni todos los datos que generalmente incluyen esos estudios, cuando son serios, dicha “encuesta” carece de valor.
En el argot político, cuando se presentan encuestas alteradas, se dice que son “cuchareadas”; es decir, que se manipulan los resultados para favorecer a algún o algunos actores políticos o para perjudicar a otros. En este caso, ni siquiera podría aplicarse ese término, porque es evidente que esa encuesta nunca fue levantada.
Rocío Nahle podría tener esos 34 puntos o incluso más; pero se observa muy difícil que los otros siete u ocho aspirantes estén tan atrás: Manuel Huerta, por ejemplo, tiene el control de los programas sociales, y cuenta con un ejército de promotores del voto; Gómez Cazarín, por su parte, ha recorrido todo el territorio estatal como el único presidente de la Jucopo que ha ocupado ese espacio durante dos periodos consecutivos.
Zenyazen Escobar es muy probablemente el integrante del gabinete con mayor exposición mediática; ha permanecido en contacto con estudiantes, maestros y padres de familia durante 3 años y medio; y sus recorridos por Veracruz son permanentes. Ya fue diputado, el primer coordinador que tuvo la bancada de Morena en el Congreso local
Ni qué decir de Ahued, quien ha ganado por holgado margen todas las elecciones en que ha competido; ya fue dos alcalde de la capital, diputado local y federal, y senador. Ha buscado el voto, con éxito, en 2004, 2009, 2013, 2018 y 2021.
Gutiérrez Luna tiene un par de años con una fuerte exposición; y no hay semana en que se esté en Veracruz, en reuniones con sectores sociales y productivos. Ubicarlo con un 4.6 por ciento y por consiguiente descarrilarlo de la contienda, parece una mala broma.
Recordemos que uno de los hombres mejor informados del país, como lo es el secretario de Gobernación, no le confiaría su operación política a cualquiera; y Gutiérrez Luna es el representante de Adán Augusto López en Veracruz.
Pareciera que la guerra al interior de Morena, partido mayoritario en la entidad, está comenzando; y que en esta disputa habrá de todo, desde patadas por debajo de la mesa, hasta golpes bajos y piquetes de ojos.
La confianza de Cuitláhuac en Sergio Rodríguez
La conversación se registró durante el encuentro de beisbol entre el Águila de Veracruz y los Generales de Durango, el jueves pasado.
En el estadio Beto Ávila, del Puerto, el gobernador veracruzano compartió puntos de vista sobre el deporte en la entidad con el procurador del Medio Ambiente, Sergio Rodríguez Cortés. El mensaje entre líneas fue evidente: no sólo hay una buena relación entre ellos, sino sobre todo confianza del mandatario en su funcionario responsable del cuidado al entorno ambiental.
Parece que las campañas orquestadas contra Rodríguez Cortés no tuvieron efecto y que la confianza de Cuitláhuac García en el titular de la PMA está intacta.
Los amigos del funcionario afirman que su trabajo al frente de la dependencia ha sido permanente y transparente.
Lo cierto es que en términos de cercanía con el ejecutivo, el partido de beisbol del jueves pasado no fue una base por bola, sino un buen batazo de Rodríguez Cortés
@luisromero85