Cierre de negocios con más de 30 años de existencia no es por un problema real, son causas que se van sumando y detonan en la quiebra económica, “ningún negocio es para siempre”: Sedecop.

Xalapa, Ver.- El cierre de negocios con más de 30 años de antigüedad en la capital del estado, no obedeció a un “problema real”, sino que fueron circunstancias que se sumaron y detonaron la quiebra económica, señaló el director de Promoción, Emprendedores y Mipymes de la Secretaría de Desarrollo Económico y Portuario (Sedecop) Everardo Paíz Malagón.

Dijo que el promedio de vida de las empresas en Veracruz es de entre seis y siete años; sin embargo con la pandemia del coronavirus las reglas de la permanencia en el mercado cambiaron, y ahora ningún negocio se podría decir que “es para siempre”.

Al cuestionarle si la Sedecop ha hecho un estudio para conocer el por qué establecimientos que llevaban más de 30 años establecidos quebraron cómo el Hotel Limón; Tiendas Contino; Zapaterías y Tiendas de Ropa en Xalapa, Paiz Malagón dijo que la antigüedad no les aseguraba el éxito como negocios.

“No necesariamente una trayectoria pasada te asegura un éxito futuro, cada caso es específico y sería difícil poner una regla”, indicó.

¿Cómo Sedecop se han acercado a los empresarios de estos negocios para preguntarles el por qué quebraron sus negocios?

“Desde luego que sí. Si claro (hemos hablado) permanentemente con cada uno de los empresarios. Por eso te digo cada uno de los casos es específico, obedece a circunstancias específicos. No hay un problema real, son causas que se van sumando” afirmó el funcionario.

Explicó que las empresas medianas generan alrededor de 50 empleos directos, mientras que las micro y pequeñas oscilan entre 10 y 30 trabajadores, y de estas algunas tienen permanencia en el mercado de entre 6 y 7 años en Veracruz.

“Acuérdense que las medianas tienen más de 50 integrantes; las micro y pequeñas no tengo el dato (de cuánto duran) algunas hablan de 7 años, otras de 6 años, pero dependiendo de la certificación de prueba y efectividad”.

Señaló que la pandemia del coronavirus “cambio las reglas” de vigencia de negocios en el mercado, y ahora “ya no son para siempre”.

“La pandemia nos enseñó que las reglas no son para siempre, las circunstancias económicas son dinámicas, cambiantes; que si hablamos de un promedio de vida como referencia pero no necesariamente que se cumplan” dijo.

Refirió que las empresas micro pequeñas tienen la ventaja y desventaja que aprenden sobre la marcha, aunque sus dueños son personas dedicadas a esa actividad como un autoempleo.

AVC/Verónica Huerta