Lo hemos comentado acá anteriormente, Esteban Ramírez Zepeta prefirió dejar la comodidad de una oficina, los privilegios de estar al lado del gobernador de Veracruz y los beneficios de ser burócrata; él regresó a tocar base en MORENA, desde su trabajo político en el partido, junto a Yair Ademar Domínguez, aporta y opera mientras que los reflectores se los llevan otros.
Nunca se ha salido del guion, replicando los dichos del fundador del partido, hoy presidente de la República; Esteban toma postura, declara, hace circular boletines, señala a quienes debe y reconoce también; una característica fundamental de los políticos de partido, que saben la agenda, están al tanto, aprovechan y no dejan pasar la oportunidad de entrar en el debate público. Aunque, para su proyección personal, eso no le beneficia siempre pues, obligado por el ímpetu de Andrés Manuel, debe seguir línea sin mediar entre verdad y retórica.
Mientras sus compañeros de proyecto disfrutan las mieles del éxito y la popularidad, en giras, socializando, inaugurando, regalando selfies, entre aplausos, ayudantes, choferes y camionetonas; Esteban recorre Veracruz para hablar con las bases, algo que no se ve en las dirigencias estatales de los demás partidos políticos. “Con todo y frío, lluvia, en fin de semana, seguimos trabajando por la #4T con los 20 enlaces distritales”, publicó a mediados de mes en sus redes sociales, actividad que han reaizado frecuentemente en varias zonas del estado.
Pero también visita a los alcaldes, los de extracción morenista obviamente, igualmente se reúne con actores políticos de los partidos “aliados” de MORENA en Veracruz; va a la Ciudad de México para dar seguimiento a temas de carácter nacional de la vida partidista, incluso en audiencia con Mario Delgado y Citlalli Hernández.
En la opinión y percepción social hay nombres muy presentes de funcionarios que abonan disciplinadamente al proyecto del gobernador Cuitláhuac García, Zenyazen Escobar, por ejemplo; ello suma también al proyecto de Morena en Veracruz y, aunque no se vea tanto por el ambiente escabroso del debate nacional, provocado en gran parte por su lider máximo, también es sumar a la 4T de Andrés Manuel. Esteban Ramíerez Zepeta, y el ya mencionado Yair Ademar, hoy están al frente de Morena en Veracruz, y ambos suman diariamente, sin necesidad de estridencias o protagonismos; esa es la chamba política que perdura.
Ni a favor ni en contra, por mera descripción de lo que se ve y difunden, ahí tenemos ejemplos de políticos jóvenes que parecen viejos. Si en Morena los méritos de trabajo y académicos fueran suficientes, más que el chapulineo partidista, ellos merecerían más. Y algo hay que tomar en cuenta, no tendrían la libertad de trabajar como lo hacen si no tuvieran la confianza del gobernador.