Gobierno de México desestima riesgo sanitario. “Estos virus ayudan al propósito de lograr la inmunidad social”.

Sólo se ha podido vacunar al 56% de la población con esquema completo, lejos de naciones como Uruguay, Chile, Ecuador e incluso Cuba.

Por primera vez desde el inicio de la pandemia, en la última semana de 2021 se registraron en el mundo en promedio más de un millón de casos diarios confirmados. Tan sólo en México, durante el 31 de diciembre, se reportaron 10 mil 43 contagios, la mayor cantidad de casos de Covid19 confirmados para un día desde el 24 de septiembre pasado. A causa de la variante ómicron, la pandemia tendrá en las próximas semanas su tercera ola.

De acuerdo a cifras proyectadas por el Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington (IHME), México podría registrar más de 24 mil muertes en los próximos tres meses a causa de la nueva variante del Covid19. (https://covid19.healthdata.org/mexico?view=cumulative-deaths&tab=trend).

Nuestro país ya es el segundo con más casos de ómicron en Latinoamérica. Desde el lunes 27 de diciembre comenzaron a dispararse los contagios de 943 positivos a llegar hasta 10 mil 43 el viernes 31, cifra récord en esta nueva ola y los expertos consideran que podría ser hasta 30 veces mayor, toda vez que no se trata de cifras actualizadas.

De continuar esta tendencia, las muertes por COVID-19 registradas diariamente aumentarían hasta 300 hacia el 10 de febrero, según calcula el propio IHME, fecha en la cual probablemente ocurriría el pico de contagios por ómicron y delta. (Becerra-Acosta. El tsunami de Covid que se viene: ¿24 mil muertos más? El Universal, 010122).

Sin embargo, para el gobierno de México, no hay de qué preocuparse. Bajo el criterio de la inmunización de rebaño, se mantiene firme en la sentencia de que “estos virus ayudan al propósito de lograr inmunidad social”.

Según el subsecretario López Gatell, “la nueva variante del coronavirus no causa enfermedad más grave, no cambiará el curso de la epidemia, cancelar vuelos no es útil y que estos virus ayudan al propósito de lograr la inmunidad social.”

Pero la realidad tiene otros datos. Hasta ahora, la variante ómicron es el virus más contagioso que se haya conocido. La nueva variante cuenta con 50 nuevas mutaciones respecto del virus original y más 32 mutaciones en el gen S, varias de ellas relacionadas con incremento en la transmisibilidad y escape a la inmunidad.

Las primeras evidencias indican un escape a la inmunidad y una transmisibilidad mayor que para Delta. Cabe señalar que Delta era hasta un 60% más contagiosa que su predecesora, Alfa (detectada originalmente en Reino Unido), y la evidencia preliminar sugiere que Ómicron es capaz de infectar el doble de rápido que Delta.

Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó hace unas semanas, en la víspera de las celebraciones de fin de año, tomar medidas ante ómicron, como cerrar fronteras y cancelar movilidad para retrasar el ingreso de la nueva variante, así como diseñar esquemas de pruebas y seguimiento de casos sospechosos para romper cadenas de transmisión, además de reforzar los sistemas de salud internos. Ninguna de estas recomendaciones fue aplicada en México.

No hay de qué preocuparse: López-Gatell

Al inicio de la pandemia, con una evidente ignorancia sobre su naturaleza y mortalidad, el gobierno mexicano calculó en 6 mil el número de muertes a causa del Covid19, y en el escenario más catastrófico, se podrían alcanzar hasta los 60 mil decesos. Al inicio de este 2022, el país está por alcanzar el medio millón de muertes a causa de la pandemia.

Ahora López-Gatell repite un diagnóstico fallido alejado de la realidad. Para el funcionario, en el mundo se ha sobreestimado a la variante ómicron del virus SARS-CoV-2 que produce el covid-19. Y mientras países en Europa cierran fronteras y aerolíneas cancelan miles de vuelos en todo el mundo por el impacto de Ómicron, López-Gatell asegura que esa variante del covid-19 es menos peligrosa que sus antecesoras.”

“La variante ómicron sigue causando inquietud en circuitos financieros, noticias, etcétera, hasta el momento la evidencia sigue siendo la que hemos comentado desde que se dio a conocer esta variante, el 26 de noviembre pasado. Es una variante que es claramente más transmisible, pero es una variante que produce menos enfermedad grave.”

Sin embargo, para el epidemiólogo Jaime Sepúlveda Amor, las autoridades mexicanas están minimizando la llegada de ómicron. “Es un asunto de tiempo para que también sea la variante predominante en México. Va a ser un invierno difícil, al coexistir la transmisión de la variante delta con ómicron y además el virus de influenza” dijo en una entrevista publicada por el diario español El País.

Calculó que será cuestión de semanas para que ómicron se convierta en la variante predominante como ya sucede en Europa. Aquí en Europa el número de casos de ómicron se duplica cada dos días, mientras que delta lo hacía cada dos semanas. Es un ritmo de crecimiento muchísimo mayor.

Vacunación, por debajo de Ecuador y Cuba

A pesar de que el presidente López Obrador asegura que la campaña de vacunación es una misión cumplida, lo cierto es que México está aún lejos de países como Uruguay, Chile, Ecuador e incluso Cuba.

A la fecha han llegado más de 200 millones de dosis del antígeno, sin embargo, solo se ha vacunado a la mitad de la población con el cuadro completo y unos cuantos que ya tienen el refuerzo. Hasta ahora, nadie sabe dónde está el resto de las vacunas no cuánto han costado al gobierno de México,

Hasta el 13 de diciembre, y de acuerdo con datos oficiales, poco menos de la mitad de la población tiene vacunación completa (sin contar inyección de refuerzo). Solo 4 estados del país han alcanzado el 70% o más de la población que ha recibido al menos una dosis de vacuna, y… cero estados han alcanzado el 70% o más de la población que está completamente vacunada.

México fue el primer país latinoamericano en recibir la vacuna contra la covid-19, y un año más tarde, uno de los más rezagados en vacunación en el continente. De hecho, sólo el 63% de las personas en nuestro país ha recibido al menos una dosis de vacuna y el 56% está completamente vacunada.

Sin una estrategia de vacunación eficiente y sin un protocolo para enfrentarlo, ómicron exhibirá, una vez más, la fallida estrategia del gobierno.