Todavía no hay resultados finales, oficiales; y todo parece indicar que la elección interna de este domingo por la dirigencia estatal del Partido Acción Nacional en Veracruz terminará por resolverse en tribunales, igual que en el proceso pasado; sin embargo, comienza a correr la versión de que Joaquín Guzmán Avilés perdió la contienda-

De confirmarse la derrota del ex alcalde de Tantoyuca, esta elección habrá significado oxígeno puro para el grupo Yunes de Boca del Río, y sus aliados en el PAN: el diputado local Enrique Cambranis Torres y el ex alcalde de Tierra Blanca, Tito Delfín Cano, recluido por presunto fraude.

Las primeras señales de desesperación de Guzmán Avilés comenzaron a notarse desde muy temprano: alrededor de las 18:00 horas, entre ese equipo se corrió la versión de una victoria seis a uno sobre Federico Salomón, el candidato que suplió a Tito Delfín en esta contienda. Probablemente les pareció desproporcionado ese resultado, de tal manera que posteriormente dejaron correr la especie de que habían ganado dos a uno. Tampoco era cierto.

Un poco más tarde, Joaquín Guzmán subió a sus redes sociales un video en el que celebraba su triunfo; agradeció el apoyo de la militancia y llamó a construir un partido cercano a la gente.

Nada de eso; al parecer, preso de la desesperación, el de Tantoyuca se apresuró a declararse ganador de la interna, a pesar de saber que el resultado era incierto; sólo fue un intento de madruguete.

Federico Salomón, por su parte, fue mucho más mesurado; por la noche, declaró que una diferencia de más de mil votos le daba el triunfo; dijo que ya contaba con todas las actas de escrutinio y que más de 9 mil 800 militantes votaron por la fórmula que originalmente encabezaba Tito Delfín.

El Comité Directivo Estatal, encabezado de forma interina por Guilebaldo García Zenil, a quien se identifica como simpatizante del grupo de Guzmán Avilés, casi se vio obligado a emitir un comunicado en el que negó que existiera “algún ganador de la contienda interna que se lleva a cabo este domingo desde temprana hora”.

El boletín difundido pasadas las 20:00 horas por el equipo de prensa del PAN, indica que “a pesar de que los dos candidatos se declararon ganadores, ninguno puede ser considerado como tal, porque el proceso electoral interno sigue su curso, dado que todavía se lleva a cabo la recepción y registro de los votos por parte de los integrantes de la Comisión Estatal Organizadora.”

Para ese momento ya se percibía un olor a derrota entre los simpatizantes de Joaquín Guzmán, que pasaron de celebrar una victoria seis a uno; a otra dos a uno; para finalmente a aceptar que nada estaba definido.

De forma extraoficial trascendió por la madrugada de este lunes que la diferencia entre Federico Salomón –grupo identificado con Yunes– y Guzmán Avilés era de 597 votos. El conteo de la Comisión Estatal Organizadora arrojó el siguiente resultado: Tito Delfín, es decir Federico Salomón, 9 mil 30 votos; Joaquín Guzmán, 8 mil 433.

De confirmarse, este resultado coloca a los Yunes en la antesala de la candidatura al 2024; descarrila cualquier proyecto estatal futuro de Joaquín Guzmán, quien tendría que refugiarse en Tantoyuca; y de paso, significaría un golpe al senador Julen Rementería, principal aliado de Guzmán Avilés, en su aspiración por entrar a la carrera por la sucesión.

Como sea, todo indica que una vez más, la dirigencia estatal panista terminará por definirse en los tribunales; Guzmán Avilés ya anunció que impugnará el resultado, a pesar de que no pudo ganar la interna con una comisión organizadora a modo y con su adversario en la cárcel.

Día redondo para los Yunes: ganan la interna panista y la Sala Regional del Tribunal Electoral confirma el triunfo de Patricia Lobeira en Veracruz.

@luisromero85