¡Vayan a jaquear a su $%&\=ad@ #ç+dre!
—Chopenjawer
Es viernes y ya pasó casi una semana desde que se marcó la fecha de inicio para el regreso a clases presenciales. No todos regresaron: hubo muchas escuelas vacías y algunas apenas están adoptando medidas para adaptarse a un modelo híbrido o escalonado.
Si bien este regreso a clases presenciales no parece haber sido totalmente un éxito por la ausencia de estudiantes, ya era necesario que se fijara una fecha para el retorno.
Por el tema de la pandemia, quizás se hubiese estado posponiendo la fecha de arranque, sumado a la irresponsabilidad de la gente que no se cuida, no se vacuna, incluso no cree en el Covid. Quizás hubiesen pasado varios años para que entonces los alumnos, alumnas, “alemnes” regresaran a clases con el 100% de seguridad de que están a salvo. Un tiempo valioso que se hubiese perdido.
Mire, la realidad es que no se puede decir que estamos a salvo porque todavía no sabemos todo del “coronabicho” y las vacunas que están son de mera emergencia; se sigue investigando, y apenas se está explorando los terrenos de una vacuna comercial y de venta masiva como el Vaporub.
Es obvio que la gente que sale de sus casas está expuesta a contagiarse: todos lo estamos.
Pero si algo han remarcado las autoridades sanitarias (aparte del confinamiento en casos extremos) es que un simple cubrebocas y un lavado de manos o uso de alcohol para lavarlas, ayuda mucho para combatir al Covid.
Definitivamente había qué regresar a clases y existen posturas encontradas sobre el tema, pero el gobierno tenía que dar ya arranque para ir configurando sobre la marcha (como lo ha sido todo con este bicho) la manera más práctica para dar y recibir clases.
Sí, es una apuesta muy arriesgada, pero al final de cuentas son los padres de familia los que determinarán lo mejor para sus hijos. Si los mandan o no, es un asunto de ellos.
Lo que sí se tiene qué comentar es que el Plan de Vacunación quedó rebasado por la realidad: mientras ya arrancaron las clases, muchos jóvenes no están vacunados o apenas tienen la primera dosis; ya ni se diga de los niños, de los cuales no han autorizado que se vacunen o ni siquiera están contemplado en el esquema selectivo por edades.
La lentitud de dicha campaña de vacunación también se vio afectada por la desconfianza que tiene el sector magisterial a las vacunas chinas Cansino (de una sola dosis) que no está avalada en varios países del mundo, pero en México —bendita 4T— van a aceptar hasta la cubana, isla donde todavía proclaman que las epidemias de dengue son a causa de una guerra bacteriológica del imperialismo (es verdad, eso lo ví en la tele cubana con estos ojos que algún día se comerán los gusanos).
Así que entre una vacunación lenta, selectiva y con productos que no dan confianza, así regresamos a clases.
A lo mejor hubiese ayudado más una vacuna masiva, pareja para todos, pero es lo que hay.
Nota para pegar en el refri: “Lokelio” Franco tenía muy mal calculado el asunto de hacer alianza con Miguel Ángel Yunes Linares. Sumarse al proyecto personal/familiar de la familia Yunes Márquez y servirles de comparsa es lo que precisamente lo mantienen en la cárcel; de igual manera, no estaba midiendo el estar denigrando al que hoy es gobernador de Veracruz (eso le debe estar remordiendo en la consciencia, si es que la tiene)… Ayer era el “poderoso” secretario de Gobierno con título “patito” de la UV, el político veracruzano que incluso pudo haber estado cercano al actual presidente de la República, pero el joven tuxpeño prefirió entregarse de lleno a las delicias del dinero como muchos de los perredistas, cuyo tiempo de “luchadores” sociales terminó para convertirse en viles mercaderes del poder. Una cúpula corrupta que nunca se dio cuenta que no vendía otra cosa más que las glorias pasadas de sus líderes morales como Cuauhtémoc y Andrés Manuel, y que cuando estos se fueron, sólo se quedaron con la banderita de ser “luchadores de izquierda”, cuando muchos en su trinche vida habían abanderado realmente una causa… Hoy “Lokelio” sufre en la cárcel y probablemente esté ahí hasta el resto del sexenio, a merced del que manda, en un lugar que inevitablemente te quiebra el alma, porque de entrada esa ilusión de poder terminó de sopetón con una realidad donde pasas a tener baño de lujo privado a una letrina apestosa para lidiar con la mierda. Su intentona de “rendir protesta” para ser diputado federal fue una verdadera vacilada que ni siquiera los “yunifans” más aferrados e ilusos se creyeron… Al final de cuentas, a “Lokelio” le pasó lo que a muchos de los que colaboran con esa banda canina que huye a sus viviendas de lujo en el extranjero cuando se las ven negras: les cae como una especie de maldición donde terminan enfermos, o infartados, o en el bote, o exiliados, etcétera.
Otra nota: Y el chorote anterior viene a colación porque —nadie lo veía venir— le cayó la poli a la exdiputada federal del PRD, Azucena “N”, quien apenas hace dos días perdió el fuero por el cambio de legislatura. Se ve que la tenían bien vigilada mientras armaban la carpeta, porque la también exregidora de Tihuatlán ni se las olía o de otro modo no se explica qué hacía en Xalapa cuando fue detenida por sendas investigaciones por homicidio doloso calificado (la señalan de haber matado a su exesposo) y otras dos más pero en grado de tentativa… Es sabido que la exlegisladora es muy cercana a Rogelio “N”, el exsecretario de Gobierno en el miniYunato; y a Gregorio “N”, exalcalde de Tihuatlán, a quien incluso le vinculan sentimentalmente y también tiene fama pública de ser una verdadera fichita… Es curioso, pero ahora con tanto perredista detenido por delitos graves (nivel “finísimas personas”) pareciera que el exgober “Cascarita” en realidad no conocía a las alimañas que estaba sumando para hacerse del poder en Veracruz. Es extraño, porque si alguien se jacta de saber del mundo del espionaje, hackeo e información confidencial es precisamente el tenebroso exgobernador. Luego entonces, se supone que sabía la alianza que estaba haciendo con personajes oscuros, malandros a los que tarde o temprano les iba a caer el moco.
La última porque la torta me revolotea en la panza: Perro oso de los senadores veracruzanos Indira Rosales San Román y Julen Rementería tomándose la foto con el presidente del partido español de ultraderecha Vox… Lo más chistoso es que la cuenta de los senadores del PAN en Twitter borró la publicación que presumían orgullosamente con el fascista… En una de esas, no tardan en disfrazarse del KuKluxKlan, de yunques o de nazis y declararse raza aria superior a los jarochos… ¡Jolinez! ¿Poz qué teneís en la cabeza, gilipollas?