Coatzacoalcos, Ver.- La Diócesis de San Andrés Tuxtla exigió a las autoridades que se esclarezca el secuestro y asesinato del ministro religioso Cirilo Delgado Feliciano, quien era un laico, casado y con familia, era un acólito que sirvió en la iglesia San Juan Obispo de Acayucan, señaló el vocero de la diócesis, el presbítero Teódulo Morales Mezo.
Dijo que aunque algunas versiones lo identificaban como sacerdote, no lo era, ya que era un ministro religioso pero como laico, una persona que ayudaba a los sacerdotes a impartir la comunión, tanto a los enfermos como a la gente, cuando haya muchas personas.
Asimismo, precisó que el actual párroco de la iglesia San Juan Obispo es el sacerdote Ramiro López Cerino, quien se encuentra hospitalizado por COVID-19.
Señaló que han tenido contacto con las personas de la parroquia y señalaron que el ministro sirvió como 14 años en la iglesia y lo reconocían como una buena persona, por lo que desconocen si había alguna situación de riesgo o que contara con enemigos.
Afirmó que en los últimos meses, en Acayucan ha prevalecido la violencia; en el caso del ministro fue víctima de secuestro y días después fue encontrado su cadáver en «circunstancias verdaderamente crueles».
El vocero de la Diócesis de San andrés tuxtla dijo que se unen al dolor que embarga a la familia del ministro, lamentaron los hechos que ocurren en el sur de Veracruz y exigen a las autoridades resultado en materia de seguridad, que garanticen un estado de derecho y de paz para todas las familias veracruzanas.
AVC
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