Afortunadamente para Morena y sus gobernantes, el huracán “Grace” pasó por Veracruz
75 días después de las elecciones del 6 de junio pasado, si no quién sabe si el alcalde electo de Xalapa, Ricardo Ahued, y el diputado federal Rafael Hernández Villalpando, así como las diputadas locales Rosalinda Galindo y Ana Miriam Farráez hubieran arrasado en los comicios como sorpresivamente lograron hacerlo.
Y es que a pesar de que fueron alertados a tiempo por los sistemas estatal y nacional meteorológicos sobre la trayectoria y magnitud del huracán que se avecinaba sobre el estado, ni antes ni después de las torrenciales lluvias se les vio coordinarse y apoyar a la autoridades municipales y del estado para poner a salvo a las familias más vulnerables que habitan en los suburbios y asentamientos de alto riesgo de la capital veracruzana donde está el voto mayoritario de Morena.
Tragedias como la de una madre y sus cinco hijos que murieron sepultados por un deslave en la colonia Brisas del Sedeño, y otra menor de edad que falleció también enterrada por un alud en la colonia 21 de Marzo, ambas de Xalapa, pudieron evitarse si el personal de Protección Civil del Ayuntamiento que preside el morenista Hipólito Rodríguez Herrero, o de la secretaría del ramo que encabeza Guadalupe Osorno en el Gobierno del Estado, junto con los llamados Servidores de la Nación de la Secretaría de Bienestar del gobierno federal, hubieran trasladado a tiempo a los albergues a las familias más expuestas.
Y es que tampoco se trataba de incurrir en el extremo populista del exgobernador Fidel Herrera Beltrán, quien en una ocasión instruyó que las familias del fraccionamiento Floresta, del puerto de Veracruz, que se negaban refugiarse en el albergue instalado en el World Trade Center de Boca del Río, fueran alojadas en algunos hoteles de la zona conurbada mientras pasaba el temporal que amenazaba con inundar, como cada temporada de huracanes, ese asentamiento de clase media del puerto jarocho.
Para colmo, este sábado, el Ayuntamiento de Xalapa cometió el imperdonable error de emitir un insensible boletín con el encabezado “Todo el apoyo a la familia afectada por derrumbe”, en el que notificaba que “se apoya al padre de los cinco menores y esposa fallecidos en la colonia Brisas del Sedeño con trámite de actas de nacimiento hasta la posible reubicación”.
En el argot veracruzano eso cayó como una sonora “mentada de madre”. Igual que el ridículo que hicieron algunos miembros del gabinete estatal, como el secretario de Finanzas y Planeación, José Luis Lima Franco, quien difundió en su cuenta de Facebook una fotografía en la que se ve arrojando una cubetada de agua del patio de la casa del señor Justo García Mendoza, vecino de la colonia La Lagunilla, pero inexplicablemente … ¡el piso no se ve encharcado sino totalmente seco!, lo que le valió al titular de la Sefiplan que sus seguidores en esa red social lo tildaran de “simulador”.
“Los mexicanos siempre hemos demostrado ser un pueblo unido, un pueblo que no se suelta en momentos difíciles y que sabe reponerse siempre.
“Hoy no será la excepción, uniremos esfuerzos y haremos lo necesario para recuperarnos”, publicó Lima Franco, quien además afirmó que “hoy Veracruz cuenta con los recursos necesarios para hacer frente a este tipo de desastres naturales, y atenderemos a toda la población afectada.”
Sin embargo, en su versión digital, el diario Reforma publicó anoche que “a más de 24 horas del impacto de ‘Grace’, habitantes y autoridades informaron que siguen sin suministro de energía eléctrica y señal telefónica en zonas de municipios como Poza Rica (de donde es originario el secretario de Finanzas y Planeación), Tecolutla, Papantla, Gutiérrez Zamora, Nautla, Tihuatlán y Coatzintla, en el norte de Veracruz”.
Ahora sí que Lima Franco resultó ser “candil de la calle y oscuridad de su casa”.
Así va a estar muy difícil que llegue a ser candidato de Morena a gobernador, como le estarían haciendo creer algunos de sus acelerados asesores.