Aunque Morena contaba en Guerrero con aspirantes a la gubernatura con mejores perfiles y trayectorias públicas, primero la cúpula del partido en el poder se empecinó en postular a Félix Salgado Macedonio y luego, ante la cancelación de su registro por parte del INE y del Tribunal Federal Electoral, la dirigencia morenista impuso a la hija mayor del senador con licencia, mediante una encuesta amañada para disimular el burdo acto nepotista.
La designación de Evelyn Salgado Pineda se hizo mediante una encuesta del partido y dos externas que solamente incluyó a otro par de aspirantes: a la ex alcaldesa de Atoyac y ex candidata de Morena al gobierno de Michoacán, María de la Luz Ramos, y a la senadora y ex líder de las autodefensas en Olinalá, Guerrero, Nestora Salgado.
Sin embargo, a pesar de que solicitó ser considerada también en la encuesta de Morena, la ex perredista Beatriz Mojica fue inexplicablemente excluida no obstante que en 2015 fue la primera candidata mujer del PRD a la gubernatura de Guerrero.
Mojica, actualmente militante de Morena, es maestra y especialista en desarrollo de políticas públicas; preside la asociación civil “Mi Corazón es Guerrero”, dedicada a promover diálogos para la paz y el desarrollo en el estado. De 2015 a 2017 fue secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, partido del que dimitió en 2019, y además fue diputada federal al Congreso de la Unión (2003-2006).
La que generó suspicacias sobre la encuestas fue María de la Luz Ramos, quien en conferencia de prensa virtual, al momento de saludar, cometió la pifia de adelantarse antes que nadie en dar los resultados del supuesto sondeo. “Me encuentro satisfecha de haber participado en esta encuesta para poder legitimar a la compañera Evelyn, que sin duda llevaba las de ganar, pero también me siento muy, muy feliz”, manifestó Ramos.
La Comisión Nacional de Encuestas de Morena señaló que la aspirante con mayor conocimiento entre la población era Nestora Salgado con 38.7 por ciento. Sin embargo, al preguntársele a quién prefería como candidata, el 37.9 % de los 1,200 encuestados se pronunció “por la hija de Félix Salgado”, y sólo 13.9 % por Nestora.
“Nosotros podemos llegar a la conclusión de que la compañera Evelyn Salgado es la compañera más posicionada en este momento para representar al partido Morena en el estado de Guerrero”, aseguró la síndica con licencia del Ayuntamiento de Xalapa, Ivonne Cisneros, de la Comisión Nacional de Encuestas.
Además de su pobre trayectoria pública, Evelyn ha sido cuestionada por su parentesco político con personas ligadas a grupos del crimen organizado. Señalan directamente a Joaquín Alonso Piedra, (a) “El Abulón”, preso desde 2016 en el Centro de Readaptación Federal 17 de Michoacán por sus vínculos con el cártel de los Beltrán Leyva. “El Abulón” es padre del empresario Alfredo Alonso Bustamante, pareja sentimental de la hija de Salgado Macedonio.
Pero otra de las principales opciones que tienen los votantes guerrerenses es el candidato de la alianza PRI-PRD, Mario Moreno Arcos, quien es señalado también de estar emparentado con uno de los capos más violentos de la región: Onésimo “El Necho” Marquina, líder del cártel de Tlacotepec.
En Guerrero no sólo contravienen el discurso morenista de que en el régimen de la 4T se acabaron los pactos con grupos criminales, sino que además exhiben al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien como candidato criticó en Veracruz lo que llamó “la monarquía de la moronga azul”, por la intentona del entonces gobernador Miguel Ángel Yunes Linares de querer heredarle el poder a su primogénito.
Gordillista asalta fuerza por méxico
Quizá por tratarse de un partido de reciente creación no ha sido tan visible, pero lo que ocurre en Fuerza por México en Veracruz es un reflejo de la lucha de poder que se libra en el Altiplano, acuerdos y amarres que repercuten en la provincia.
Al líder sindical Pedro Haces Barba, el mandamás de esta nueva franquicia, parece que se lo acaban de comer de un solo bocado, pues por un tema de conveniencia electorera se le ocurrió relevar a Eduardo “Tato” Vega Yunes de la dirigencia estatal y enviarlo a caminar en busca de la diputación por el octavo distrito electoral federal (Xalapa Rural), a casi un mes de los comicios.
Pero el detalle está en que al parecer puso la Iglesia en manos de Lutero, al entregarle el partido a la ex diputada por Nueva Alianza, Jacqueline García, tristemente célebre por ser una saltimbanqui consagrada. Pero lo que el líder nacional de la CATEM seguramente ignora es la cercanísima relación de García con la maestra Elba Esther Gordillo, ex fundadora del extinto PANAL y ahora dueña de Redes Sociales Progresistas (RSP).
Pero, por si fuera poco, hace no más de 15 días Jacqueline todavía formaba parte de las filas de Movimiento Ciudadano, donde algunos líderes del partido naranja siempre tuvieron sospechas de que operaba para los candidatos federales de RSP y Gordillo, no para los abanderados del instituto liderado por el senador veracruzano Dante Delgado.
De ahí que en Fuerza por México también comiencen a verla con desconfianza, pues saben del reto que implicará asegurar más del 3 por ciento de la votación federal para mantener el registro. Temen que, en una de esas, se aplique más en mantener a flote al partido de Elba Esther.
Ya el tiempo dirá si al senador campechano Pedro Haces y al diputado poblano Gerardo Islas, dirigente nacional de Fuerza por México, los chamaqueó la maquiavélica guía moral del SNTE.