La decisión de enajenar a título gratuito a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) el 66 por ciento del rancho Las Mesas, ubicado en Valle de Bravo, se debe a que “el proceso de recuperación estuvo mal”, dijo el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez.
El mandatario aprovechó los cuestionamientos de la prensa en torno a la solicitud de enajenación que se discute en el Congreso de Veracruz, para insistir en que durante el Gobierno de Miguel no se recuperaron bienes en manos de ex dualistas y que su administración ha tenido que litigar y pagar expropiaciones de bienes que quedaron sin concretarse, aunque en su momento se dijo que ya estaban en poder del estado.
“Por qué va a la Sedena, porque lo dejaron mal, hay un tercero ahí y tenemos que proteger el derecho del tercero, nada más para que se den cuenta y se diga la verdad del gran engaño que fue eso; fue realmente un engaño, un arreglo, ‘te lo expropió lo pago, pero déjame decir que yo lo recuperé y que el Gobierno que viene cargue la bolita, a ver qué hace’, se recuperó pero a un costo muy elevado, hubo que asistir a los juzgados, pelearlo, llegar a un acuerdo final para pago”, explicó.
Dijo que durante dos años se buscó la forma de recuperar el rancho de 96 hectáreas, ya que aclaró que aunque el estado tiene la posesión de este inmueble hay un tercero que es dueño de un parte de este, a pesar de que se trata de una propiedad incautada por la Fiscalía General de la República (FGR) al ex gobernador Javier Duarte de Ochoa.
AVC
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