Cuatro personas, entre ellas un niño, murieron el miércoles cuando un hombre abrió fuego en un edificio de oficinas en la ciudad de Orange, al sur de Los Ángeles, informó la policía.
El atacante, cuyas motivaciones se desconocen de momento, también resultó herido de bala tras la intervención de la policía y fue transportado a un hospital.
Una quinta víctima, que quedó herida, también fue hospitalizada.
La policía no ha dado ningún detalle sobre las víctimas.
El tiroteo ocurrió hacia las 17h30 locales en el último piso de un pequeño edificio de oficinas.
Según el diario Los Angeles Times, los policías que llegaron al lugar recibieron disparos y respondieron a los mismos.
Este tiroteo ocurre tras dos matanzas registradas en las últimas semanas en Estados Unidos, que han relanzado el debate sobre la proliferación de armas de fuego en el país.
El 22 de marzo, un atacante mató a diez personas en un supermercado en Colorado, menos de una semana después de que un hombre asesinara a ocho personas en salones de masaje asiáticos de Atlanta.
“Hoy a las 5:30 pm, el Departamento de Policía de Orange respondió a una llamada de disparos contra el 202 W. Lincoln Ave”, precisó en Facebook el Departamento de Policía de Orange.
INFORMACIÓN/UNI2NOTICIAS