Practicantes del parkour en Xalapa enfrentan el estigma de ser “vagos” o delincuentes por parte de quienes no entienden esta disciplina que se implantó en la ciudad desde hace 10 años y que consiste en usar el cuerpo para moverse de manera fluida en el entorno.
Erik Deliar Ortega Reynoso, integrante del grupo True Evolution, narra que en la ciudad hay por lo menos tres grupos que se dedican a la práctica de este deporte; se trata de Xalaparkour, Fabrip Konx, LAMFO, en donde confluyen jóvenes de entre 15 y 30 años, pero también niños de 7 años que son impulsados por sus padres.
“La gente nos suele discriminar un poco, cuando vamos a los parques nos han corrido porque dicen que dañamos el pasto, porque se incomoda la gente, nos dicen que es un deporte de vagos porque vamos con ropa cómoda para practicarlo, se van sólo con la apariencia”.
Dice que los saltos, brincos, estiramientos que realizan tienen el objetivo de que quien practica el parkour asuma el control de su cuerpo, elimine las obstáculos o sepa cómo enfrentarlos, lo cual es un tipo de conocimiento que ayuda no solo en esta disciplina sino en la vida en general.
“Se trata de podernos mover en nuestro en entorno de la manera más fluida y eficaz (…) Te desbloquea mentalmente, al principio da miedo pero conforme vas practicando lo controlas, puedes ser más ágil ante cualquier riesgo, se tiene más equilibrio”.
Para ellos lo mismo sirve un parque que cualquier estructura que les permita medir su elasticidad, capacidad de salto, agarre y otras técnicas que van aprendiendo, por eso es que pueden verse en el parque Juárez o en la plaza Xallitic; sin embargo, considera que lo ideal es contar con un espacio propio en donde puedan practicarlo.
Admite que desde hace varios años han solicitado a las autoridades locales que se adecue un espacio que les permita practicar el parkour, pero hasta ahora les ha sido negado; ello ha generado que los grupos sean corridos de los espacios públicos por considerar que “pierden el tiempo” o molestan a quienes acuden a estos sitios.
“Hemos hecho propuestas para construir este tipo de espacios, hemos metido varias solicitudes y no nos han tomado en cuenta (…) Sería beneficio tener un espacio propio porque al parkour lo han tachado como que es de delincuentes”.
En el caso de Erik inició con esta práctica desde hace dos años y con el tiempo ha ganado fortaleza en piernas, cuello, brazos, además de movilidad, elasticidad, fuerza y equilibro, por lo cual recomienda este deporte a quienes buscan mejorar su salud.
Sin embargo, señaló que a raíz de la presencia de la pandemia por covid-19 la práctica de esta disciplina en Xalapa se ha frenado al menos de manera pública, por lo que actualmente hay quienes siguen con sus rutinas de entrenamiento en sus hogares.
AVC/Perla Sandoval
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