Orizaba, Ver.- La Diócesis de Orizaba lamentó que tal y como sucedió en la administración del ex gobernador Javier Duarte de Ochoa en donde niños con cáncer dejaron de recibir sus medicamentos, hoy se repita en esta administración de la Cuarta Transformación que encabeza el mandatario Cuitláhuac García Jiménez.

El vocero diocesano Helkyn Enríquez Báez lamentó que a pesar de que es un sector importante que se debe atender de forma prioritaria, la sociedad civil tenga que actuar con eventos altruistas ante esta situación que enfrentan los padres para sanar a sus hijos.

«Con mucha preocupación descubrimos que se repita la historia dramática para los niños que padecen cáncer, para sus padres y para todos los que en un momento se preocupan por ellos. Tal parece que el famoso desarrollo y atención de todos los ciudadanos donde todos parecerían importar parece que no se constata, creemos que los niños deben ser primero en situaciones de tensión, se debe de privilegiar puesto que, eso manifiesta la sensibilidad política y social que podemos tener como nación».

Enríquez Báez mencionó que no es posible que el Gobierno del Estado no los atienda y que tenga que ser la sociedad civil la que aborda un tema que tocaría resolver al Gobierno, pues con los impuestos que se recaudan, se deben aplicar en este sector fundamental en favor de su salud.

Preocupante desaparición de fideicomisos

En cuanto a la aprobación de la desaparición de los 109 fideicomisos, el prelado dijo que estos recursos fueron logrados a lo largo de los años a solicitud de ciudadanos y permitían cubrir distintos campos que requiere el desarrollo integral del país.

«Existe preocupación ciertamente de que se genere un retroceso puesto que la ciencia y la tecnología propias en un país en desarrollo como el nuestro son necesarios e indispensables para seguir creciendo».

Agregó que antes que haber tomado dicha decisión, tuvieron que hacer una auditoría para el combate de la corrupción qué tanto abandera y así ejercer las acciones necesarias en contra de quienes hayan delinquido con el mal uso de dichos recursos, además de hacer un supervisión de los mismos ya que este tipo de acciones también generan la sospecha de que estos recursos puedan ser mal orientados.

«Ahora se queda la sospecha del modo como se va a supervisar y el modo como se van a asignar; siempre puede existir también el riesgo del desvío de estos recursos que no sean aplicados para lo que originalmente se habían dispuesto».

AVC

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