Luego de que la iniciativa para prohibir la venta de “comida chatarra” a menores de edad ya es ley en los estados de Oaxaca y Tabasco, legisladores y gobernadores de Morena de otros nueve estados del país –entre ellos Veracruz, por supuesto- preparan nuevas propuestas para prohibir la venta de alimentos y bebidas de alto contenido calórico a esta población.
En esta ruta ya se encuentran los diputados locales de Colima, Sinaloa, Jalisco, Morelos, Hidalgo, Nuevo León, Baja California Sur y Zacatecas; además del gobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández, y la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum
Si bien desde el 2014 en México existe la Ley General de Salud que prohíbe en las escuelas de educación básica, en todos los niveles, la venta de comida chatarra, el gobierno federal busca encontrar una justificación a los más de 60 mil muertos a causa de la pandemia del Covid19. Es la comida, no es la estrategia, aseguran.
Por ello, los gobiernos de Morena han puesto nuevamente en la agenda pública la prohibición de la comida chatarra a niñas, niños y adolescentes. Sin embargo, en el estado de Veracruz esta iniciativa ha sido motivo para dividir a las diferentes corrientes del partido en el Congreso federal y del estado.
De manera inusual, durante la sesión de la Comisión Permanente del martes pasado, diputados de Morena presentaron hasta tres iniciativas en el mismo sentido, mismas que días después se sabría no contaban con el apoyo de su coordinador parlamentario y que se trataba de impulsos individuales o de un pequeño grupo de legisladores.
La primera de ellas fue la iniciativa ante el Congreso de la Unión que presentó la diputada Deisy Juan Antonio, quien propuso una reforma la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes para incorporar el derecho a una alimentación saludable, además de que la obesidad y desnutrición sea considerada un problema de salud pública. De aprobarse el dictamen, se turnará al Congreso federal para su análisis y estudio.
Una segunda iniciativa la presentó la diputada Magaly Armenta (Morena) y busca reformar la Ley de Salud del estado para reglamentar el acceso que tiene este sector de la población al consumo de bebidas azucaradas y alimentos de alto contenido calórico, conocido coloquialmente como “comida chatarra”. Serán las comisiones de Salud y Educación las que determinen su viabilidad.
Y en la misma sesión se lanzó una tercera propuesta de la que aquí nos ocupamos el jueves pasado. La diputada Ana Miriam Ferráez presentó –a nombre de sólo 7 diputados de Morena- una iniciativa para hacer un exhorto a las autoridades competentes para sumarse a la revisión de la propuesta de la iniciativa para erradicar el sobrepeso y obesidad que se había presentado minutos antes.
Las iniciativas no sólo buscan prohibir la venta de este tipo de productos en el estado sino que incluso plantean multar o retirar el permiso a negocios dedicados a la venta de alimentos azucarados y gaseosas.
Sin embargo, cuando todo parecía caminar bien en la ola reformadora a favor de la sana alimentación y en contra de la comida chatarra, el tema dividió a los principales actores de Morena, quienes incluso acusaron al diputado Juan Javier Gómez Cazarín de mandarlas a la congeladora cuando ni siquiera han llegado a las comisiones para su estudio y dictamen.
El fin de semana, el pastor morenista en el Congreso local dijo que no es prioritario aprobar la legislación que prohíbe la venta de comida chatarra y que una vez que se superen los retos de salud y de economía veracruzana se podrá revisar a fondo la propuesta. «Es más importante enfocarse en la pandemia, que el virus vaya a la baja, reactivar la economía. No digo que no sea importante la salud de los niños pero estamos viviendo tiempos diferentes», dijo Gómez Cazarín.
Su postura mereció la encendida respuesta de su correligionaria la diputada federal, Claudia Tello Espinosa, quien dijo que el coordinador morenista se equivoca al minimizar la “Ley Antichatarra”, ya que con esta iniciativa se cuidará la salud de los veracruzanos desde la niñez y recordó que fueron diputadas morenistas quienes presentaron las dos propuestas –el tercero fue un exhorto- que buscan sancionar a quien venda o regale comida chatarra a menores de edad en el estado de Veracruz.
Tello insistió en que no coincide con Gómez Cazarín, ya que la Legislatura del Estado “debería estar preparada para atender todos los temas que aquejan a los veracruzanos y la salud de los menores no se puede minimizar en tiempos de pandemia, sobre todo cuando ya se atiende por las áreas correspondientes.”
Es evidente que en la víspera del inicio del proceso electoral, los grupos al interior de Morena se polarizan más y empiezan a establecer sus propias agendas. Es un tema de votos, no de refrescos y papitas.
Las del estribo…
- Ayer el Secretario de Finanzas, José Luis Lima Franco anunció el inicio del proceso para concretar la reestructuración de la deuda de la bursatilización de 199 municipios en Veracruz por más de mil 400 millones de pesos a través del Banobras. En los próximos días solicitarán a los Cabildos involucrados avalar un financiamiento o un crédito simple y posteriormente someter este asunto a aprobación del Congreso, lo que por fin permitirá liquidar la herencia maldita de la bursatilización. No hay que perder de vista a Lima Franco.
- Del Secretario de Gobierno Eric Cisneros Burgos se han dicho muchas cosas. Sin embargo, no se puede regatear que tuvo los arrestos de visitar ayer el municipio de Acultzingo donde se había señalado de la presencia de grupos de autodefensa. Sin duda, ha ido mostrando más oficio político y agallas que muchos otros que aspiran a lo mismo.