Este martes por la tarde, el presidente del CDE del PRI, Marlon Ramírez Marín, me compartió el contenido de una carta que le envió al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador y que dará a conocer públicamente hoy, al momento en que esté saludando a su homólogo estadounidense Donald Trump.
Por considerarla de interés general la reproduzco íntegra en esta columna.
Carta de felicitación al presidente de los Estados Unidos Mexicanos
Lic. Andrés Manuel López Obrador
Señor Presidente:
Aprovecho este día para felicitarlo por refrendar el Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos y Canadá (que ahora se llama T-MEC), elaborado hace poco más de 26 años por el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari y que entró en vigor el 1 de enero de 1994.
No deja de ser paradójico que en aquel entonces, usted fue uno de los más férreos impugnadores de ese Tratado y acusó al presidente Salinas de querer vender al país y dejar sin oportunidades laborales a los trabajadores mexicanos.
Un cuarto de siglo después, ni se ha perdido un metro cuadrado del territorio nacional y el Tratado ha cambiado el modo de vida de cientos de miles de compatriotas, como también lo ha hecho con cientos de miles de nuestros paisanos que viven en el vecino país.
Tampoco deja de ser paradójico que cuando Donald Trump, ya ungido presidente de Estados Unidos de Norte América, dijo que lo único que había hecho el TLC era beneficiar a México y por lo tanto lo desaparecería; usted que en ese entonces era candidato a la presidencia de la República, alzó la voz y urgió a su antecesor Enrique Peña Nieto, a hacer lo posible por refrendar el T-MEC a fin de evitar la “ruina” del país.
Ante esto no hay más que felicitarlo por su congruencia.
Si de transformaciones se trata, México era un país con una economía cerrada antes del TLC y ahora un país con una economía muy abierta después de ese tratado. Esto permitió que regiones enteras del país como el norte y el centro se vieran beneficiadas. Y el cambio es evidente.
Ahora falta el sur y es su turno, Presidente. Con el acuerdo comercial que entró en vigor el pasado 1 de julio la región sur del país deberá verse favorecida. Y otra cosa, no olvide que nuestro país sigue siendo la única potencia exportadora de América Latina gracias al TLC.
Hoy, mientras salude a su homólogo en la Casa Blanca, no olvide presidente López Obrador que la gloria no es suya sino de quienes le antecedieron hace 26 años y hace dos años y medio.
Usted se opuso al TLC hace un cuarto de siglo y no fue usted quien llevó a feliz término el T-MEC. Así que nada de hacer caravana con sombrero ajeno.
A pesar de los pesares y sobre todo a pesar de la situación financiera y el coronavirus, el T-MEC es una excelente oportunidad para que México repunte, siempre y cuando abra usted las puertas a la inversión extranjera y a la nacional con certeza en su inversión sin temerle a los ánimos con los cuales usted afronte su día, sea cual sea.
La mesa está puesta, ojalá por el bien de México no jale usted el mantel.
Ah, casi lo olvido. Su visita a Estados Unidos es reprobada por casi todo mundo, incluso por sus fieles seguidores. Pero la Casa Blanca la califica de “muy positiva” y compara la relación entre usted y el presidente Trump como la que tuvieron Benito Juárez y Abraham Lincoln.
Difiero de esta aseveración. La amistad entre Juárez y Lincoln estuvo basada en el respeto mutuo y no en la sumisión de uno al otro. Además, Juárez y Lincoln fueron estadistas cuya grandeza es universal, grandeza que solo la historia concede.
Señor Presidente: en conclusión le decimos que el TLCAN fue un gran impulso para México y el T-MEC sin duda lo será, y quienes militamos en el PRI nos sentimos orgullosos de que hayan sido gobernantes emanados de nuestro partido los creadores e impulsores de ambos tratados.
Hoy no queda más que reconocerle a usted su primer acierto en el Gobierno de la República, el de seguir el ejemplo de quienes han sido visionarios y estadistas, esperamos que por fin terminen los discursos de polarización, odio y división que en nada abonan al país y se deje de lado el oportunismo político y ligereza con que se descalifica nuestra militancia.
De nuestra parte reciba un cordial saludo y el deseo de que la situación económica nacional repunte, ante el manejo institucional erróneo que ha tenido la pandemia de COVID-19 y que sea para bien de los ciudadanos, de nada nos sirve que le vaya mal al Gobierno, si con esto no le va bien a los mexicanos.
A t e n t a m e n t e
Lic. Marlon Ramírez Marín
Presidente del Comité Directivo Estatal del PRI Veracruz