El tema de los abusos cometidos por elementos policiacos no es un nuevo en Veracruz; la historia reciente ha documentado decenas de casos; todo tipo de atropellos, desde abusos de autoridad hasta privación ilegal de la libertad y homicidio.
A pesar de los esfuerzos en materia de capacitación y de los controles de confianza, los abusos se siguen registrando.
Aquí varios ejemplos: el lunes 21 de octubre de 2019 fue detenido Iván “N”, quien se desempeñaba como comandante de la policía estatal en Alvarado. Se acusó por la detención arbitraria de 12 personas, y abuso de autoridad.
El 14 de noviembre del año pasado, dos elementos de la Policía municipal de Ixtaczoquitlán, zona centro de Veracruz, fueron detenidos por el presunto delito de desaparición forzada de 7 personas.
El 16 de enero, ya en 2020, tres elementos de la Policía Ministerial fueron capturados; se les acusó por los presuntos delitos de privación ilegal de la libertad, incumplimiento de un deber legal y cohecho.
No había pasado ni un mes cuando el 7 de febrero, 4 policías municipales de Paso del Macho fueron detenidos por los presuntos delitos de delincuencia organizada, desaparición forzada y homicidio doloso en agravio de un joven de 21 años, a quien habrían secuestrado el 16 de noviembre de 2019.
El 7 de marzo, en Coatepec, municipio cercano a la capital de Veracruz, Seguridad Pública detuvo a una banda a la que se le incautaron armas, vehículos y drogas; entre los detenidos se encontraba una mujer que era elemento de la propia policía estatal; es decir, fue detenida por sus compañeros de corporación.
El caso más reciente se registró el miércoles 1 de abril: por el presunto delito de homicidio doloso calificado y abuso de autoridad fueron detenidos cuatro policías municipales de Hueyapan de Ocampo, quienes habrían dado muerte, por una brutal golpiza, a una persona que sólo había cometido faltas administrativas. Entre los detenidos se encuentra el comandante de la corporación.
Es sólo un breve recuento, una pequeña parte de una larguísima cadena de abusos, atropellos y actos delincuenciales cometidos por policías veracruzanos. Estos son, a fin de cuentas, los detenidos, los que no pudieron evadir la acción de la justicia; podría haber otros que gozan de impunidad.
Lo importante es que décadas atrás era sumamente raro ver noticias de policías detenidos.
En el ámbito nacional, el caso más sonado, el de mayor escándalo, fue la captura de Arturo Durazo Moreno, el ex poderoso jefe del Departamento de Policía en el Distrito Federal en el sexenio de José López Portillo. “El Negro” Durazo personificó en los ochentas toda la podredumbre del sistema policial mexicano y así pasó a la historia.
La captura de Durazo, sin embargo, fue excepción y no regla, porque durante años ha prevalecido la impunidad con respecto a los policías que deciden delinquir; por eso llama tanto la atención que sólo en Veracruz, en los recientes cinco meses, hayan sido capturados por diferentes delitos 15 elementos de diferentes corporaciones, entre ellos dos comandantes. @luisromero85