Imelda Castro, egresada de la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana (UV), forma parte del elenco del cortometraje Saria, nominado a la 92ª edición de los Premios de la Academia Óscar 2020, como Mejor Cortometraje de Ficción.
La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood propuso el filme del director Bryan Buckley como uno de los cinco nominados para la estatuilla de oro, que se entregará este 9 de febrero en una ceremonia que tendrá lugar en el Dolby Theatre de Hollywood, de Los Ángeles, California, Estados Unidos.
Esta noticia entusiasmó a la actriz originaria de Huatusco, Veracruz, pues se trata de la consolidación de un sueño que desde niña mantuvo en su imaginario.
Con la fúlgida realidad encima, Imelda espera que el cortometraje logre el objetivo esperado, sobre todo porque la historia de Saria recrea la tragedia ocurrida el 5 de abril de 2017, en el Hogar Seguro Virgen de la Asunción, del municipio de San José Pinula, en Guatemala, donde fallecieron 41 niñas y adolescentes.
Fue un caso que conmocionó al mundo entero, ya que tras ese siniestro se reveló que los niños hacinados en ese lugar también eran víctimas de abusos violentos, sexuales y tráfico.
El camino hacia la actuación
Todo empezó cuando Imelda era pequeña, mientras jugaba con sus hermanos y amigos a interpretar personajes en obras de teatro que ellos mismos ideaban o hasta de lucha libre; ella pensaba estudiar actuación, pisar los escenarios y ser una gran actriz.
El tiempo transcurrió, su aspiración creció y en su natal Huatusco participó en concursos de declamación y oratoria, y en pequeñas muestras teatrales; una de ellas fue Jesucristo Súper Estrella, que reunió a niños, jóvenes y adultos de esa ciudad de las altas montañas.
En ese periodo, el sentido de pertenencia hacia el teatro se fortaleció, pero a pesar de que sus orientadores vocacionales sabían de sus aspiraciones, nunca le comentaron que la UV contaba con una Facultad de Teatro.
Más adelante, su hermana, quien estudiaba Danza en la UV, le comunicó que sí la había y de inmediato presentó el examen de ingreso, en el cual se ubicó en la cuarta posición.
Entre 1999 y 2003, Imelda cursó sus estudios en la máxima casa de estudios de Veracruz y se enfrentó a todo lo que implicaba ser una actriz.
“Es una etapa de mi vida que recuerdo con mucho cariño y emoción, a la Facultad de Teatro le debo toda mi formación.”
«Antes de que todo esto pasara soñé que estaba en los Óscar”
“Siempre lo soñé”, expresó la actriz, quien hoy radica en la Ciudad de México. “De hecho, antes de que todo esto pasara un día me desperté porque había soñado que estaba en los Premios Óscar”.
Respecto a su participación, Imelda comentó que dentro del cortometraje da vida a Ms. López, uno de los personajes antagónicos de la historia.
“Quedé muy conmovida con el personaje porque ni yo misma me reconocí, no me vi como Imelda, me vi como el personaje, eso para mí fue muy gratificante; pienso que hace falta retratar a los personajes aunque sea una cuestión muy fuerte para que se logre lo que el director está buscando.”
Sin embargo, para estar dentro del elenco Imelda pasó por un casting, al cual fue convocada en julio del año pasado por la agencia de actores a la cual pertenece.
Cuando vio las características de Ms. López, la actriz sintió una empatía inmediata. Tras haber hecho la prueba –que a propósito fue una de las últimas en llegar, pues antes ya habían pasado un centenar de actrices– regresó a su casa muy contenta sin esperar que el resultado la favorecería, incluso se olvidó de ello.
“Al principio me inquietaba cuando hacía una audición y no me hablaban, con el tiempo he aprendido a soltar y olvidar, si me hablan bien, y si no también, como he sufrido varias decepciones no me permito emocionarme tanto.”
Transcurrieron dos semanas hasta que por medio de un mensaje de WhatsApp se enteró que había sido seleccionada para el papel antagónico de Saria.
“Me encanta todo el recorrido que hice para estar ahí, ser elegida entre cientos y dentro de las mejores, pero sobre todo haber sido seleccionada por el propio Bryan Buckley, quien ha dirigido a estrellas de la talla de Robert De Niro y Melanie Griffith.”
Por lo anterior, elogió el trabajo del director de cine y guionista, así como su generosidad, humildad y sencillez. “A cada uno de nosotros nos daba las indicaciones mirándonos a los ojos, es muy minucioso y detallista con el vestuario y maquillaje”.
Para él, dijo Imelda, nadie es más importante que los demás, el cortometraje se hizo con el trabajo de todos y si gana el Óscar, el premio será para todos.
“Si llegamos a obtener la estatuilla de oro, máximo galardón de la academia de Hollywood, representaría tener más claro todo lo que quiero, trabajar con este tipo de directores que a pesar de ser internacionales tiene tanta humildad”, subrayó.
También recomendó a los jóvenes que están en proceso de formación actoral, a seguir su inspiración y sus propios instintos: “Seguramente se toparán con muchas desilusiones, pero así es la vida y este medio, el teatro es una carrera de resistencia, no importa si hoy estás arriba porque mañana deberás empezar desde cero pues el proyecto ya concluyó”.
UV/Claudia Peralta