Al igual que el ex policía estrella del calderonismo, Genaro García Luna –actualmente bajo proceso penal en una Corte federal de Nueva York, acusado de proteger al Cártel de Sinaloa, de Joaquín «El Chapo» Guzmán–, al secretario de Seguridad Pública del estado, Hugo Gutiérrez Maldonado, le fascinan los reflectores de los medios de comunicación.
Pero ni García Luna ni Gutiérrez Maldonado son los únicos jefes policiacos que han resaltado por su debilidad de autopromoverse mediáticamente.
En el pasado tuvieron la misma adicción otros personajes como el súper policía capitalino Arturo «El Negro» Durazo Moreno, amigo de la infancia del ex presidente José López Portillo, el cual terminó encarcelado el sexenio siguiente, el de Miguel de la Madrid Hurtado, por corrupto y por sus nexos con el hampa de la Ciudad de México.
En Veracruz, otro de los titulares de la Secretaría de Seguridad Pública que siempre procuró a los medios de comunicación fue Alejandro Montano Guzmán, por su aspiración personal de suceder a Miguel Alemán Velasco en la gubernatura y por la pretensión de su jefe de lograr la fallida candidatura del PRI a la Presidencia de la República.
El duartista Arturo Bermúdez Zurita tampoco se pudo sustraer al encanto mediático.
Pero a diferencia de sus antecesores, ahora Gutiérrez Maldonado tiene la ventaja de autopromoverse no sólo en los medios tradicionales de comunicación como prensa, radio y televisión sino también en los portales digitales y, sobre todo, en las redes sociales que hace 15 años no tenían el impacto de hoy.
Al policía oriundo de Nuevo León le cuesta trabajo controlar la declaracionitis. Y a veces sobredimensiona algunas acciones de sus subordinados –como el «rescate» de un menor de edad desaparecido en el puerto de Veracruz que fue hallado accidentalmente por unos repartidores de una compañía porteña de gas– o termina yéndose de la lengua, ventilando públicamente situaciones que por prudencia o estrategia debería mantener en absoluta discrecionalidad.
Su último derrape verbal acaba de motivar un desmentido público de su compañero de gabinete Eric Cisneros, secretario de Gobierno, con quien hasta agosto pasado venía haciendo buena mancuerna para lograr la salida de Jorge Winckler de la Fiscalía General del Estado, órgano constitucionalmente autónomo cuyos principales cargos fueron ocupados por personeros y recomendados de ambos funcionarios tras la separación del abogado yunista mediante un polémico acuerdo de la Diputación Permanente.
Y es que el pasado viernes 13, en su afán por explicar la reciente cadena de crímenes en Xalapa, el secretario de Seguridad Pública afirmó que dichas ejecuciones tienen que ver con la disputa de la plaza que protagonizan al menos dos de las cinco organizaciones delictivas que operan en el estado, señalando concretamente al grupo de Los Zetas y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Sin embargo, tres días después, el secretario de Gobierno desmintió la versión del titular de la SSP, misma que había confirmado también el alcalde xalapeño Hipólito Rodríguez Herrero, de MORENA.
Pero Cisneros negó tajantemente que sean cárteles de la delincuencia organizada los que operan y se disputan la plaza de la capital veracruzana, puntualizando que en realidad sólo se trata de «bandas de personas que se han dedicado a una cosa u otra”.
Los incongruente es que tanto el titular de la SSP como el de la SEGOB participan cada mañana en la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz que suele presidir el gobernador Cuitláhuac García acompañado de los representantes de la Sedena, la Marina y de la Guardia Nacional, lo que le ha valido al mandatario veracruzano el reconocimiento público del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por cierto, este miércoles, tanto Cisneros como Gutiérrez Maldonado acompañaron a García Jiménez a la sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública que encabezó López Obrador en Palacio Nacional, en la que el Jefe del Ejecutivo federal distinguió al mandatario estatal de Veracruz con el nombramiento de presidente de la recién creada Comisión de Prevención del Delito y Participación Ciudadana del CNSP.
¿Continuarán los rumores de que AMLO sacará a Cuitláhuac de la gubernatura en diciembre de 2020? Hasta ahora se ve muy dificil que lo haga.