Luz Eugenia Libertad Rubio Salvador, recién egresada de la Facultad de Ciencias Químicas (FCQ) de la Universidad Veracruzana (UV), realizó un reporte técnico sobre la reparación y mantenimiento hechos a la unidad o planta decoquizadora retardada (U-31000) de la Refinería “General Lázaro Cárdenas del Río”, de Petróleos Mexicanos (Pemex), en Minatitlán, Veracruz.

Este trabajo fue resultado de la experiencia educativa (EE) Experiencia Recepcional y contó con la asesoría de Rafael Gómez Rodríguez, catedrático del programa educativo (PE) Ingeniería Química.

“Reporte técnico para la rehabilitación de los hornos H-31001 y H-31002 de la unidad coquizadora U-31000”, es el título de este proyecto que sirvió para que Luz Eugenia obtuviera su título profesional, presentado ante un jurado en los primeros días de octubre.

La joven, originaria de Minatitlán, dio a conocer que tras ingresar a la refinería para realizar prácticas de apoyo a los encargados de la operación de equipos, surgió la propuesta de realizar un reporte del mantenimiento correctivo que una compañía externa hizo a la unidad de coquización y gas asociada U-31000, entre agosto y octubre de 2018.

Dicha unidad consta de hornos que elevan la temperatura del crudo o el petróleo que viene de otra planta combinada, para después procesar la extracción de gasolina, nafta y diésel.

Este proceso de craqueo térmico tiene la finalidad de trasformar los residuos pesados en productos de alto valor comercial.

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El último producto que de ahí se obtiene es el coque, un desecho del petróleo empleado en la construcción y fabricación de cerámicas para fortalecer la mezcla de arcilla o cemento, que es enviado a otros estados del país.

La egresada comentó que con este trabajo pretende crear un antecedente sobre la reparación de los hornos de coquización o intercambiadores de calor, pues una vez que concluye la labor de las compañías externas encargadas del mantenimiento, a Pemex no le queda ninguna evidencia.

“Lo único que conservan son permisos de trabajo, que no se consideran un reporte como tal.”

Asimismo, resaltó que desde su instalación, en 2011, estos hornos no habían recibido mantenimiento, lo que genera altos costos, desperdicio de combustible, pérdidas considerables y una baja producción de coque.

La utilidad del reporte consiste en establecer qué se reparó, cómo se hizo, cuánto tiempo duró el mantenimiento de cada equipo, si fue algún motor o motoventilador, entre otros aspectos.

En un inicio y con la ayuda de su asesor, la joven se enfocó a la búsqueda de trabajos similares hechos a nivel nacional e internacional sobre mantenimientos a refinerías y equipo industrial.

Respecto a la relación que este reporte tiene con su profesión, Luz Eugenia expresó que hay muchas variables inmiscuidas, tales como presión y temperatura, que se estudian teóricamente durante la carrera.

El resultado de esta labor que desarrolló durante un año, fueron algunas estrategias, evidencias y propuestas sobre reparaciones futuras.

El plan de trabajo destaca dónde debe iniciarse una próxima reparación; sin embargo, para ello primero se requiere definir ciertos objetivos. Una vez que se tengan las metas trazadas, se continuará con la elección del mantenimiento, si será correctivo, preventivo o de confiabilidad.

Posteriormente, se distribuirán las responsabilidades entre el personal inmediato de la planta y se hará un listado de los recursos con los que se cuenta. De ahí, vendrá la etapa de operación y manipulación del material y, por último, la comprobación y arranque de la planta.

“Ahí se verá si en realidad lo que se planteó y trabajó fue efectivo, si no se tendrá que elegir otro tipo de mantenimiento.”

Rubio Salvador precisó que la planta, situada en los límites del río Coatzacoalcos, tiene una superficie de 4.5 hectáreas y altura de 40 pisos, aproximadamente.

En 2011, su producción diaria era de tres mil 500 a cuatro mil barriles de petróleo, pero con el tiempo se redujo a sólo dos mil 500 a tres mil barriles diarios de coque, situación que afecta en gran medida a los obreros y transportistas de Minatitlán.

“Este proyecto me dejó mucho aprendizaje y garantiza que lo visto en las aulas sí se lleva a la práctica, también me deja una visión futura del área laboral en la que me gustaría insertarme, así como la satisfacción de que pude realizar mi trabajo recepcional.”

Cabe destacar que el objetivo principal de la Refinería “General Lázaro Cárdenas del Río” es la obtención de productos derivados del petróleo crudo, tales como diésel, gasolina, kerosina y gas licuado (gas LP), así como lubricantes.

UV/ Claudia Peralta