Veracruz, Ver.- Apenas el árbitro marcó el inicio del encuentro y los jugadores del club de futbol Tiburones Rojos de Veracruz se quedaron parados en la cancha.
Sin importar los silbidos de los aficionados, los once jugadores permanecieron inamovibles ante los movimientos del equipo Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).
Luego de tres toques y la asistencia de André-Pierre Gignac, Luis Chaka Rodríguez disparó desde tres cuartos de cancha para anotar el primer tanto del encuentro ante la mirada indiferente del portero Sebastián Jurado.
Las rechiflas continuaron en tanto el árbitro del partido dudaba si reiniciar el encuentro. Todos los jugadores de Veracruz permanecieron en sus sitios.
En días pasados, los Tiburones Rojos habían denunciado que llevan hasta seis meses sin cobrar su sueldo y exigieron a la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) que interviniera para resolver dicha problemática.
La plantilla del equipo había amagado con no jugar el encuentro ante Tigres. Posteriormente, anunciaron que se presentarían al partido, pero durante los tres primeros minutos realizarían una protesta.
Distintos clubes del futbol mexicano habían manifestado su solidaridad con los Tiburones Rojos, incluso el propio Chaka Rodríguez dijo que en la medida de lo posible apoyarían a sus rivales.
No habían pasado los tres minutos de protesta del Veracruz, cuando el encuentro fue reanudado y nuevamente los jugadores se quedaron estáticos para que André-Pierre Gignac anotara el segundo gol.
La acción de los jugadores de Tigres fue duramente criticada en redes sociales, por ser antideportivos con sus rivales.
Pasados cuatro minutos, Veracruz empezó a jugar, aunque eso no evitó que al minuto siete Edu Vargas hiciera la tercera anotación.
En el minuto 26 el jugador de Tigres, Jesús Dueñas, fue expulsado tras una dura entrada y revisión del colegiado por medio del VAR.
AVC