En el último año de Miguel Ángel Yunes Linares, al igual que el de 212 alcaldes se detectó un presunto daño patrimonial de 4 mil 500 millones de pesos en el ejercicio fiscal 2018.

Así lo confirmó el Auditor General, Antonio Lorenzo Portilla Vásquez, en su último informe de resultados del periodo constitucional para el que fue electo.

Portilla Vázquez descartó que se haya buscado bajo las piedras para detectar alguna irregularidad administrativa, y evadió opinar si los exfuncionarios se sirvieron con la cuchara grande, al ser el año de hidalgo.

Al entregar el informe de la cuenta pública en el Congreso Local, el funcionario dijo que realizaron 1648 revisiones integrales a 328 entes fiscalizables. También destacó que logró el reintegró de 40.8 millones de pesos a las arcas estatales, y 39.5 millones a la tesorería de la federación y la conclusión de 188 obras por un monto de 50.7 millones de pesos.

Recordó que del 2012 al 2017 se han recuperado más de mil 600 millones de pesos.

Señaló que del 2008 al 2017, el Orfis tienen 179 denuncias presentadas por un daño aproximado de 34 mil millones de pesos.

En entrevista, explicó que son alrededor de 125 ayuntamientos con daño patrimonial de 300 millones de pesos. Mientras que los entes estatales tienen un daño de 4 mil 500 millones de pesos.

AVC