Guadalupe Hernández Vargas, investigadora que colabora en el Instituto de Biotecnología y Ecología Aplicada (Inbioteca) de la Universidad Veracruzana (UV), comentó que al estudiar la medición de algunos atributos de las plantas, en especial de las hojas, se puede conocer qué pasa en el ecosistema.
La investigadora ofreció la conferencia “La conservación de recursos es la estrategia dominante de la comunidad de plantas del bosque mesófilo de montaña”, en el marco de las actividades del Seminario Científico organizado por el Doctorado en Ciencias en Ecología y Biotecnología, la tarde del viernes 6 de septiembre.
Compartió que tiene un interés principal en la investigación relacionada con la ecología de los bosques, así que desarrolló trabajo de ecología funcional de plantas en un gradiente del bosque mesófilo de montaña, a fin de estudiar las estrategias que se usan para obtener recursos.
Hernández Vargas explicó que los ecosistemas son los organismos más todos los factores abióticos con los que se interrelacionan.
“Los procesos del ecosistema consisten en flujos de materia y energía que pueden estar integrados con los almacenes abióticos (carbono, nitrógeno, fósforo en el suelo); son obtenidos o movilizados por las bacterias en el suelo y pasan a ser flujos que se integran al ecosistema o almacenes en la materia abiótica.”
¿Qué es un atributo funcional?
Los atributos funcionales son las características morfológicas, fisiológicas y genealógicas de un organismo, considerados relevantes por su respuesta al ambiente y su efecto sobre el funcionamiento del ecosistema, expuso Guadalupe Hernández.
Un ejemplo de atributo es la masa seca por unidad de área (LMA, por sus siglas en inglés), la cual puede ofrecer información sobre cuánto invirtió de energía la planta en la construcción de la hoja.
La LMA, expuso, puede decir mucho sobre la fotosíntesis de la planta, cuánto le cuesta construir un órgano que es vital para su funcionamiento, que es la captación de energía lumínica.
“A través de la mediación de algunos atributos de las plantas, particularmente de las hojas, podemos saber qué está pasando en el ecosistema, por eso es importante este tema.”
Guadalupe Hernández advirtió que la LMA varía de acuerdo a la luz, la temperatura, el estrés de agua y nutrientes existentes.
Otro atributo, señaló, es la capacidad fotosintética y nitrógeno foliar (correlación fuerte entre el nitrógeno y la capacidad fotosintética); es decir, si medimos el nitrógeno de las hojas se infiere cuánto invierten las plantas para incrementar sus tasas de crecimiento.
“La estrategia de las plantas para la conservación de recursos es una combinación de atributos que le permiten sobrevivir y reproducirse en un determinado tiempo.”
Subrayó que los ecofisiólogos han encontrado patrones válidos para todas las plantas de diferentes ecosistemas, biomas y filogenias; con esta información se puede predecir la función que tienen en el ecosistema determinadas plantas con altos valores de LMA.
Finalmente, la investigadora reiteró que analizar, estudiar y medir las correlaciones entre los atributos nos puede mostrar información interesante sobre el ecosistema.
UV/Paola Cortés Pérez